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MIGUEL ÁNGEL LÓPEZ FARÍAS
Diría que me arden los oídos de tanto escuchar suspiros. No es poesía, es política y sobre ello dibujaré este picotazo.
En este páramo existen quienes ven los juegos sucesorios como si de un partido de fútbol se tratara, nos vaciamos en impulsos y deseos y se deja de lado la razón y la frialdad de las estadísticas.
Vamos a la cancha: en los comederos se habla con excesos de pasión sobre las listas de candidatas y candidatos de morena a las gubernaturas y particularmente la cdmx, en los callejones chilangos vemos a los bandos internos pelear a navaja limpia para hacer valer su barrio, Clara o Harfuch. Duros contra blandos, los que se sienten amos de la ortodoxia patalean y muerden, quieren a Clara nomás por qué es como ellos y habla chido. Los de Omar buscan replicar el deseo de la doctora, quien en su mesa trazo la estrategia a futuro y quiere que su ex jefe de policía la sustituya.
A ver:
¿Por qué Omar le significa un valioso activo para la doctora y para su jefe, el presidente? Lo diré de nuevo: ¿por qué Harfuch garantiza el triunfo no solo en la cdmx (algo que Clara también puede alcanzar), sino que la marca «Harfuch» podría obtener un triunfo más redondo, obteniendo diputaciones federales (distritos)?
Lo diré con manzanitas, López Obrador está apostando a obtener el control de la próxima Cámara de Diputados, a Claudia le conviene que el congreso sea suyo, su gobierno no se paralizaría (nos guste o no, eso es hacer política electoral y en ello están concentrados los que le entienden en palacio).
Los suspirantes que gritan que debe ser Clara o Sasil de León (un chiste local en Chiapas), se niegan a aceptar una sola cosa, por más que endurezcan el berrinche, al final del día tendrán que entender que existen hombres que favorecen el proyecto de quién, seguramente, será la próxima presidenta. No imagino a Claudia Sheinbaum cruzándose la banda presidencial y pasando por alto a aquellos que la obstaculizaron, que le vaciaron un estadio, que en corto o en público trataron de doblarla o peor, que se dijeron sus leales y invistieron de Judas (¿estás escuchando Jesús Ramírez?).
Queda claro que el presidente López Obrador hará todo lo posible por que Claudia no solo sea su sucesora, sino que llegue con un congreso de mayoría de morena.
¿Los duros quieren de verdad ser muy duros y poner a prueba la paciencia de su jefa?
Harfuch ganó la encuesta, supera a Clara, la doctora toma nota, el presidente tamborilea los dedos sobre la mesa y fija su atención en que el congreso no se pinte de otro color que no sea el suyo…y para ello, con o sin berrinches, en ese partido deberán asumir que el verdadero juego, la guerra se prepara para los próximos seis años.
Y algo similar ocurre con Chiapas que se ha convertido en un hervidero de grilla, de muy bajo octanaje. La encuesta le dio un triunfo de más de 15 puntos de ventaja a Eduardo Ramírez por encima de Sasil de León, el senador se convirtió en un fenómeno social, con un impacto entre los jóvenes nunca antes visto y quién estaría sumando no solo un triunfo en la gubernatura, sino la mayoría de diputaciones federales…pero los «duros » de allá decidieron retar a Sheinbaum y al propio presidente al intentar bloquear al famoso jaguar.
Y lo que se escuchó en una reunión de la doctora adquiere relevancia: «los del berrinche no son pendejos, son suicidas»…que miedo!
