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ABEL LUNA ESPINOSA
HACE AÑOS LA vi subiendo las escaleras de la Universidad Obrera de México, muy derecha, vistiendo pantalón de peto de mezclilla y sus notables trenzas, muy oscuras, bien peinadas, muy erguida en su paso con una trayectoria impresionante Beatriz Paredes Rangel después obtendría la licenciatura en Sociología, por la Universidad Nacional Autónoma de México; cursó el Posgrado en Literatura en la Hispanoamericana por la Universidad de Barcelona, España; después llegaría a la diputación federal; a la gubernatura de su estado, Tlaxcala; embajadora en Cuba, presidenta de su partido en 2008; en 2012 fue candidata a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, y desde 2018 es senadora de la República.
En las páginas de la prensa quedó plasmado el enfrentamiento que tuvo con Elba Esther Gordillo, la ex lideresa del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, quien siendo diputada trató de empujar una reforma fiscal (allá por el año 2004) haciendo el trabajo al presidente Vicente Fox.
En aquellos días Paredes paró en seco a Gordillo señalando que los diputados priistas de ninguna manera aceptarían las propuestas foxistas con vistas a las elecciones de aquel año. De esa manera, señalan las crónicas de la prensa, quedó sellado el destino de la lideresa magisterial al interior de la legislatura.
Más cercanos en el tiempo ahora Paredes se perfila positivamente frente a la empresaria Xóchitl Gálvez, colocadas entre los aspirantes a la candidatura a la presidencia del país por el Frente Amplio por México, integrado por los partidos Revolucionario Institucional, Acción Nacional y de la Revolución Democrática, cuyos líderes hicieron a un lado -habrá que recordarlo- las notorias e históricas diferencias ideológicas de antaño entre sus partidos para hoy enfrentarse a los futuros candidatos del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA)y que ilegalmente ha apoyado desde hace meses el principal inquilino de Palacio Nacional.
EN EL ESCRITORIO de Marcelo Ebrard hay una carpeta de propuestas para la realización de una serie de investigaciones electorales que se concretan en el calificativo “Sistema Inteligente de Ingeniería Electoral”; mediante el cual, aseguran sus autores, el exjefe de Gobierno del Distrito Federal podrá conocer al mayor detalle informaciones electorales de las tres últimas votaciones.
Desde hace varias semanas Ebrard recibió el documento de propuesta en propia mano durante su comparecencia -todavía como secretario de Relaciones Exteriores, en el estacionamiento del Senado de la República.
Entre los textos puede leerse: “la principal diferencia entre ganar una campaña y ganar una elección consiste en que la primera genera fama, pero la segunda el poder”
Este sistema de análisis puede proporcionar a los integrantes del “cuarto de guerra” de Ebrard los resultados de las votaciones desde los niveles estatal, municipal y en los casos de las zonas urbanas hasta alcaldías o manzanas.
Tratando de ser muy claro y específico, le mencionaré, estimado lector, con este sistema hasta pueden detectarse los niveles de simpatías o animadversiones hacia las candidaturas o por partidos políticos.
El concepto “cuarto de guerra” puede definirse como el área física en donde son elaborados los planes de una campaña electoral y son tomadas las decisiones de esa campaña.
También es el espacio en donde se reúnen especialistas e investigadores en el escenario que cada uno aporta sus experiencias y conocimientos para el enriquecimiento de esos planes.
En síntesis, los competidores políticos BM (Beatriz y Marcelo) avanzan notoriamente hacia sus candidaturas y luego llevarán a cabo sus campañas electorales formales.
