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JOSÉ GARCÍA SÁNCHEZ. Los asistentes a la concentración del Zócalo del 26 de febrero no sabían, en su mayoría, las razones de su presencia, sólo que no estaban de acuerdo con el actual gobierno, la cándida defensa al INE, era sólo un pretexto. Probablemente conocían al convocante aparente, ya sea a través de las redes o de militantes de algún partido político.
Porque más allá del frágil liderazgo de los partidos de oposición, de la figura del empresario X, hay una fuerza oculta que nada tiene que ver con la democracia ni con el nacionalismo.
El columnista del portal SinEmbargo.MX, Fabricio Mejía Madrid, mostró el origen de la manipulación de la llamada Marcha Rosa, donde tres partidos sacrificaban los colores propios de sus partidos para como integrantes de la sociedad civil a pesar de su evidente protagonismo.
GOLPE VESTIDO DE ROSA
Esta entrega de los colores y las siglas para aparentar ser muchos, es una vieja práctica de la CIA, que sirve como preámbulo para dar un Golpe de Estado contra el gobierno, lo han hecho en otros países como Georgia, Kuwait, Tunez, Ucrania, cada lucha con su respectivo color.
El puente de la CIA inicia con el financiamiento a la Fundación Nacional para la Democracia, encargada de hacer un aparente trabajo limpio de las actividades sucias del Departamento de Estado, como acaba de suceder en México el domingo 26, donde algunos salieron convencidos de luchar por la democracia y por un México mejor.
La Fundación Nacional para la Democracia otorga recursos a asociaciones mexicanas como Mexicanos contra la Corrupción, que encabeza el empresario X y dirige María Amparo Casar, —ex coordinadora de asesores de Santiago Creel cuando éste era secretario de Gobernación y Genaro García Luna fungía como director de la AFI— entre otras asociaciones mexicanas como México Unido Contra la delincuencia, México Evalúa, Consejo Mexicano de Asuntos Internacionales, entre otras.
La figura del empresario X como bisagra de la oposición no surge como compromiso personal con México sino que es escogido por Estados Unidos, para derrocar a la Cuarta Transformación, con el objetivo de preservar intereses de sus empresarios y privilegios de los serviles mexicanos que obedecen órdenes.
Es decir, el empresario X no es el jefe de nada ni de nadie, es un instrumento para patrocinar masas para destruir lo que obstruye la hegemonía de Estados Unidos. Fue escogido por su sumisión a Estados Unidos, su desapego a México, su perfil mercenario. Es el conducto ideal como para presionar al gobierno a través de la carencia de los productos que él fabrica.
En Chile meses antes del golpe militar de Pinochet hubo un artificial desabasto de toallas sanitarias que alertó a la clase media con la amenaza de que después habría escasez de carne, pollo y así tener apoyo al golpe que se veía venir.
El empresario X puede protagonizar una artificial carencia de alguno de los productos que elabora, por ejemplo pañales, cuya producción está muy cercana al monopolio y así crear un clima de terror similar al de Chile.
LA NED
La Fundación Nacional para la Democracia, conocida como NED, ha propiciado golpes de Estado violentos en Venezuela (1948), Irán (1953), Guatemala (1954), Paraguay (1954), República Dominicana (1963), Brasil (1962), Bolivia (1971), Chile (1973), Argentina (1976), entre otros.
La NED fue creada por Ronald Reagan en 1983, inspirado en su célebre discurso del 8 de junio de 1982 ante el parlamento británico, donde calificó la Unión Soviética de ser “Imperio del Mal” y propuso prestar ayuda a los disidentes, en la URSS y otros países.
La NED subvenciona cuatro estructuras supuestamente autónomas que se encargan de redistribuir en el exterior el dinero del que disponen entre asociaciones, sindicatos obreros y patronales:
El Instituto de Sindicatos Libres, ahora, Centro Americano para la Solidaridad de los Trabajadores, con influencia en la AFL-CIO; el Centro para la Empresa Privada Internacional, cuya gestión está en manos de la Cámara de Comercio de Estados Unidos; el Instituto Republicano Internacional en manos del Partido Republicano; el Instituto Nacional Democrático de Asuntos Internacionales en manos del Partido Demócrata.
La NED y sus cuatro tentáculos sostiene acciones basadas en la sociedad civil y aparentan reflejar y representar la diversidad social y el pluralismo político, pero están financiados por el pueblo estadounidense, a través del Congreso. Su verdadera misión radica en realizar actividades secretas al servicio de intereses nacionales.
La NED es parte del pacto militar anglosajón que vincula a Londres, Washington y Camberra, que incluye igualmente la red de intercepción electrónica Echelon.
El funcionamiento de NED está diseñado por los partidos políticos, consta de 8 delegados: 3 del Partido Conservador, 3 del Partido Laborista, uno del Partido Liberal y el octavo para los demás partidos representados en el parlamento británico.
La intensidad del Departamento de Estado que sostiene a la NED tiene en el centro de sus actividades y preocupaciones a la “disidencia” cubana y a la Cuarta Transformación. Todavía se recuerda a aquel troglodita llamado René Bolio, Presidente de la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos, quien agredió verbal y físicamente a uno de los guardias de seguridad en la Embajada de Cuba en México, en compañía de la corresponsable de la muerte de 39 niños en la guardería ABC, la panista Mariana Gómez del Campo.
La Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos que encabeza Bolio Hollaran, mantiene vínculos con el exilio cubano en Miami vinculado al terrorismo de Estado, y a la organización Directorio Democrático Cubano, también implicada en la petición oficial de intervención militar en Cuba.
Otras organizaciones que reciben financiamiento de la NED en México y que son activas en la subversión contra Cuba son la sección mexicana de la ONG Artículo 19, el Instituto para la Competitividad, el Institute for War and Peace Reporting, Amnistía Internacional, e Investigación e Innovación.
Desde 2016 hasta la fecha, la NED ha destinado aproximadamente 8´376,549 dólares a programas en México sobre democracia, violencia de género, emigración, elecciones y “empoderamiento político”.
Quienes ingenuamente creyeron que asistían al Zócalo para defender la democracia, al INE a México o a la Iglesia católica sólo sirvieron a los intereses de Estados Unidos.
Twitter: @Josangasa3
