Ciudad de México, 23 de mayo (entresemana.mx). El optimismo de que en el 2022 se recuperaría la economía de la crisis que causó el Covid-19, ya no se ve más, ahora, se observa una tormenta perfecta que puede llevar a una recesión, advirtió el World Economic Forum (WEF).
En el documento “Chief Economists Outlook“ que dio a conocer el Foro Económico Mundial, de Davos, Suiza, se explicó que contrario a lo que se vio a principios del año, ahora se observa que no habrá una recuperación en este año, sino que siguen los problemas como la alta inflación, presiones geopolíticas, la guerra Ucrania-Rusia, inseguridad alimentaria, altos precios de los energéticos, regreso a los confinamientos en ciudades industriales, depreciación de las monedas, entre otras cosas.
“Los responsables de la formulación de las políticas públicas se enfrentan a decisiones complejas en torno a la política monetaria ya que están en la fina línea de controlar la inflación sin llevar a las economías a una recesión”, expuso el WEF en el documento.
La incertidumbre y la polarización contribuirán a que se afecte el comercio mundial, los precios y los estándares de vida.
Lo que observó el WEF –luego de realizar una encuesta a los economistas en jefe, que concluyó el 2 de mayo– es que “la economía global está entrando a una nueva fase de alta volatilidad con menos mecanismos de coordinación y globalización global, agravando los efectos en las economías y personas más vulnerables”.
A los encuestados les preocupan los altos niveles de inflación ya que esperan que sigan las presiones en el resto del 2022, sobre todo lo observan en Latinoamérica y en Estados Unidos.
Consideran que las restricciones de los gobiernos para exportar alimentos por cuestiones de interés nacional afectará el comercio internacional y de seguir así “de seguir la trayectoria actual, el mundo va a la peor crisis alimentaria en la historia reciente, agravada por las presiones adicionales por los altos precios de los energéticos”.