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>> En acto público celebrado en la explanada del Monumento a la madre, el coordinador de la bancada senatorial de Morena presentó su libro “Las grandes reformas para el cambio de régimen”
Ciudad de México, 10 de septiembre (entresemana.mx). Confeso “zacachilango” –zacatecano de nacimiento y chilango de corazón–, Ricardo Monreal Ávila pautó su aspiración a la Presidencia de la República con un acto sabatino en la explanada del Monumento a la Madre, en la alcaldía Cuauhtémoc, oteó al futuro y sostuvo que va a derrotar a la “corcholata” que le pongan en la sucesión de Andrés Manuel López Obrador.
“Por fortuna, él (López Obrador) no estará en las boletas; por fortuna, el Movimiento (Morena) es amplio, libre y democrático. Por fortuna, nuestros adversarios serán uno de las corcholatas.
“Les vamos a vencer en su momento, los vamos a derrotar por la buena y con la buena manera de hacer política, porque vamos a hacer política de la buena, vamos a ser el presidente de la reconciliación, de la reconciliación nacional”.
Monreal en sábado de aspiraciones, esquiva el término campaña en este tipo de reuniones que realiza en diferentes partes del país y, para evitar la sanción del Instituto Nacional Electoral por actos anticipados de campaña, presenta sus libros los que él sí escribe no como los que presume el licenciado López Obrador, pero que son producto de su amanuense de cabecera.
Pero, qué se le va a hacer, sus seguidores, los que pertenecen a diferentes organizaciones lo mismo vecinales que campesinas, empresariales y de comerciantes le gritan lo evidente, el factor que no se puede ocultar quiérase que no.
“¡Presidente! ¡Presidente! ¡Presidente! ¡Presidente! ¡Presidente!”, le gritan y él, Ricardo Monreal, alza los brazos, saluda, sonríe y se despoja del saco. Hace calor en la capital del país.
“Quiero agradecerles a las organizaciones convocantes para este evento de presentación de uno de los más recientes libros que he escrito en dos tomos: “Las grandes reformas para el cambio de régimen”, abre discurso Monreal y se deja querer, lo arropan sus simpatizantes.
Y recuerda que, en efecto, el país se encuentra en transición política desde el 2018, que muchos de nosotros participamos para iniciar un proceso de transformación pública, política, económica y social al frente, con el ahora Presidente de la República, licenciado Andrés Manuel López Obrador.
Estas dos obras que ha escrito, refiere, hablan sobre el que el Poder Legislativo ha venido haciendo para iniciar el cambio de régimen.
Y abrevia:
“Todas las reformas que hemos hecho han sido producto de nuestro movimiento, fueron propuesta del candidato en ese momento, ahora Presidente, Andrés Manuel López Obrador, y las hemos llevado a ser letra vigente, Constitución viva, derecho vigente y positivo”.
Luego, en esta singular presentación del libro “Las grandes reformas para el cambio de régimen”, entra en materia y acota:
“Primero, una vez que lleguen los tiempos formales, les informo, voy a inscribirme como aspirante a suceder al Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador”.
Y provoca el grito repetido “¡Presidente! ¡Presidente! ¡Presidente! ¡Presidente! ¡Presidente! ¡Presidente!”
En ese punto reitera que una vez iniciado este proceso, “quiero expresarles, quiero ganar a la buena con Morena, porque aquí nadie se raja. Ni nos vamos a dejar, ni nos vamos a rajar. Vamos hacia adelante”.
Y el coro recita: “¡Monreal, amigo, el pueblo… está contigo!
También, insiste, “nosotros no nos vamos a confrontar con el Presidente de la República, a quien reconocemos como el dirigente social más importante que ha tenido México en los últimos años”.
“¡Sí se puede! ¡Sí se puede!”, interrumpe el respetable que llena la explanada que mira de frente al Paseo de la Reforma sin soslayar a la avenida de los Insurgentes.
Así, Ricardo Monreal comparte su experiencia en las lides partidistas. “Hace 25 años fui candidato al gobierno de Zacatecas, por la izquierda. En ese momento todas las encuestas nos daban por perdido: 5 por ciento a la izquierda; 70 por ciento al PRI. Y en cuatro meses les dimos la vuelta.
“¡Ganamos!, con legitimidad y con fuerza en Zacatecas y fue el primer Estado gobernado por la izquierda. Puedo caminar con libertad en mi tierra, puedo caminar por sus calles sin recibir un solo insulto o un solo reclamo.
“Así quiero en México caminar una vez que logremos derrotar a todo el escepticismo y derrotar por la buena a los adversarios políticos, porque sé de dónde vengo, sé a dónde voy”.
Y ante ese público que le aplaude y corea “¡Presidente!”, Ricardo Monreal se define. “Soy “zacachilango”; nací en Zacatecas, pero soy chilango de corazón. Goberné esta Alcaldía y esta Delegación, y lo hice con aplomo y con respeto a sus vecinos.
“¡Por eso estamos aquí, con fuerza, con un espíritu indomable, con un espíritu inquebrantable!, porque sé hacia dónde voy y sé de dónde vengo”.
Por eso, subraya, les agradezco a todos: a las mujeres, a los jóvenes. A todos les agradezco que estén aquí.
Y lo interrumpe otro coro: ¡Juventud… respalda a Monreal!
Así, arropado y convencido de lo que quiere, con el respaldo de la experiencia personal de quien se ha enfrentado al poder, llama a los ciudadanos:
“No tengan miedo, no tengan temor, enfrentémonos con razones, demos el debate en las redes demos el debate en los medios de comunicación, en la calle, en el barrio, con el vecino, en el trabajo. Nos asiste la razón histórica, nos asiste la razón moral.
“¡Yo no fui corcholata, fui un aspirante normal a suceder al Presidente de la República! Y en su momento nos vamos a inscribir y vamos a observar las reglas que la Ley y la Constitución establecen.
“Soy un hombre firme, un hombre de trabajo, un hombre que cree en el Estado de Derecho y en la Ley. Un hombre que cree en la buena fe y en la reconciliación. Soy un hombre de fe y soy un hombre que cree en que este país va a lograr mejores estadios de desarrollo económico, político y social.
“¡No nos van a mover ni el sol, ni la adversidad, ni la ingratitud, ni la incomprensión! ¡Vamos a luchar! ¡En su momento, vamos a luchar!”
Y le acompaña el coro que se viste de presagio: “¡Presidente! ¡Presidente! ¡Presidente!
La respuesta de Monreal es firme:
“No voy a defraudar a la gente. Sé lo que quiero. Tengo formación. Vengo desde abajo, muy de abajo, y sé lo que se sufre abajo en la casa, en la familia.
“Procedo de una familia modesta, del campo, en el norte de Zacatecas. Honro mi esencia, me siento orgulloso de mi origen, y por eso los convoco, a todos, a cerrar filas, a estar juntos para lograr un México mejor, un México igualitario y un México más justo, porque en este Movimiento ni nos vamos a dejar ni nos vamos a rajar”.
Y rubrica: ¡Arriba México!
