Rosa Elena S. Barrios
Ciudad de México, 03 de julio (entresemana.mx). Yo si quiero felicitar al equipo de comunicación del presidente de la República, definitivamente cumplen con su trabajo y se nota que han revisado con detenimiento y éxito las estrategias de propaganda de Joseph Goebbles. Así quiero que mis hijos cumplan con sus tareas.
El catedrático universitario y escritor Edmundo González Llaca, apuntó en su libro “Teoría y práctica de la propaganda” que los nazis al carecer de una filosofía coherente, ponían énfasis en lo emocional y acudían al arte de la oratoria y del espectáculo.
Tal cual como lo vivimos con el gobierno de Morena todas las mañanas, en un programa con buena producción, que se decía era una conferencia matutina, pero que ha sido recatalogada por su protagonista como un “diálogo circular”.
Se preguntarán en dónde está lo emocional. Para empezar en el enojo por el pasado, desde las disculpas exigidas a los españoles por conquistar estas tierras, hasta victimizarse y apuntar todos los días a los culpables de sus derrotas.
Que de qué derrotas hablo. Bueno, pues tenemos la de seguridad, donde el presidente no ha podido detener, es más se han incrementado, los homicidios, las balaceras, los asesinatos, culpa, dice de Calderón, de Genaro García Luna, de cualquiera menos de los cárteles de las drogas o de los hijos del Chapo, no, no, ellos merecen abrazos.
Es víctima de todo lo que se realizó desde los años 80, de las políticas neoliberales, es por ellos que no puede contener la inflación, ni mejorar la taza del empleo, o cumplir con la promesa de 10 pesos por litro de gasolina, nada tiene que ver una política económica errónea, ni el paquete fiscal que castiga a diferentes sectores.
Si ha tenido que cerrar los refugios para mujeres, los comedores escolares, las guarderías, las escuelas de tiempo completo, es su decisión, pero no es su culpa.
Las quejas porque no hay vacunas en los hospitales, ni medicamentos para los niños con cáncer, o porque tenemos que padecer un sistema de salud lento y poco práctico, es manipulación de sus detractores, de los conservadores, que lo calumnian. Recordemos que a los padres que protestaron por la falta de medicinas oncológicas los acusó de ser títeres de las farmacéuticas.
Toda una telenovela, en donde la figura principal ve como villanos a los padres de familia, a los aspiracioncitas, a los universitarios, a los clasemedieros, a cualquiera que no concuerde con sus ideas y forma de administrar nuestra Nación.
Pero González Llaca habla también del espectáculo. Como maestro seguro les daría un diez. Ahí está todo bien producido. Que el presidente recuerda una nota o un video, sin tenerlo preparada, no tardan más que unos segundos para exhibir en pantalla lo que ha pedido. Y qué pasa cuando llegan los músicos a tocar en vivo, o cuando cierra con un recuento de canciones que el mismo ha elegido, parte del show.
Finalmente, hablemos de oratoria. Media hora para contestar una pregunta. A menudo la respuesta no responde el cuestionamiento, pero sin duda nos dan una clase de historia para entender a su manera lo que hoy no tiene como justificar.
Así que palmadita para esos personajes que están detrás de bambalinas, enfocando al nuevo ídolo del pueblo. Saben cómo hacer propaganda.
Decirle hitleriano a Carlos Alazraki, exigir que exhiban los millones que ha ganado Carlos Loret, o hacer mención de las prácticas de periódicos como Reforma o El Universal, es solo para darle sal al espectáculo, es lo que sube la audiencia, es lo que hace que la conversación no sea sobre una refinería no terminada que se inauguró; o de los precios de la tortilla, los aguacates o el limón; ni de los periodistas asesinados, mejor hablemos de esas banalidades que si venden y suben los likes en las redes sociales..
SUSPIRO. Lamento la trágica muerte de más de 50 migrantes en Texas. No imagino el dolor de todas esas madres, esposas, amigas que vieron partir a su ser querido y que nunca más estará de regreso. Son muchos los pueblos en México que a veces se quedan vacíos, sin hombres y mujeres jóvenes porque van detrás de ese sueño americano, que sin duda debería ser cumplido en nuestro país. QEPD.