TERESA GIL. Se supone que la creación de la Organización de Naciones Unidas (ONU) fue a partir de dos premisas urgentes: la paz y la seguridad. Pese a ello, en vigor desde el 24 de octubre de 1945, cuatro meses después del armisticio por la Segunda Guerra Mundial, se han desarrollado más de 90 conflictos, algunos permanentes en el interior de países y otros convertidos en terribles guerras. Actualmente pese a la gran alharaca de la guerra Rusia contra Ucrania están en pleno conflicto países como Yemen, Irán, Armenia, Etiopía, Sahel, Taiwan, República Democrática del Congo y los Grandes Lagos y la injusta y genocida guerra de Israel contra Palestina, entre otras. Hay países como Haití que padecen una guerra interior que ha generado la expulsión sobre todo. Está el caso de los países donde se promueven golpes desde el exterior por los imperios como Estados Unidos; en esa situación están Venezuela y Perú, éste con una agresiva guerra golpista contra grandes multitudes. La presencia de la ONU cuando se da, casi siempre tardíamente, ha tenido pocos o nulos resultados. Un viejo caso siempre recordado en las asambleas de ese organismo, el de Cuba, permanece intacto pese a la votación masiva a favor de la isla, salvo dos o tres excepciones, Estados Unidos e Israel entre ellas.
CRÍTICAS PERMANENTES CONTRA LA ONU QUE CAEN EN EL VACÍO
La ONU debe dejar su gestoría de paz y seguridad, que es nula y seguir con los otros organismos en los que si funciona. Así como hay varios organismos internacionales que tienen especialidades, la Organización de las Naciones Unidas podría convertirse en una entidad con ciertas especializaciones, como las que ya tiene. Eso dejaría aparte a un solo organismo de seguridad en la lucha permanente por la paz, que se dedicara a eso únicamente. Se menciona al Consejo de Seguridad de la propia ONU, pero ese está inserto en los mismos problemas burocráticos y de aplicación política de sus decisiones. La misma comunidad de países podría reunirse en asamblea y repensar otro organismo independiente, porque al parecer ya se ha mencionado, que mire unicamente hacia la paz, en momentos tan delicados como los que tenemos. Estamos al borde de una guerra mundial, y se debe a países de la propia ONU, los que la están fraguando. Algunos de los organismos actuales que la integran son eficaces en lo general y cumplen las funciones que les corresponden UNICEF, OMS, OIT, FAO. ACNUR, CEPAL, et al.
AGRESIÓN GENOCIDA CONTRA PALESTINA Y LA ONU “MUY PREOCUPADA”
La nueva agresión del ejército israelí a los campamentos de refugiados palestinos, volvió a poner en alerta a la comunidad de las naciones, pero el titular y alto comisionado de derechos humanos de esa organización solo habla de “violencia sin fin”, cuando a lo largo de décadas se ha tolerado la incursión ilegal en el territorio palestino oponiéndose a sus propios documentos y avalando con su posición la complicidad que el país del norte tiene con Israel. Ahora junto con otros miembros de la ONU se rasga las vestiduras pero no hacen nada como no sea lamentarse. La exigencia de que se convoque al Consejo de Seguridad, no se veía en el momento de escribir esto. La ineficacia exhibida en ese organismo internacional ya transita en muchos lados. Se pide una convocatoria para reformar su documento gestor también del 24 de octubre de 1945, la Carta de las Naciones Unidas (Documento en UNESCO) vigente poco después de su creación, pero no se hace. En México desde el gobierno y otros sectores, se le critica a menudo.