HOMO POLÍTICUS/ Niños asesinado, ¿en qué sociedad nos hemos convertido?

“El que quiera ser águila que vuele, el que quiera ser gusano que se arrastre pero que no grite cuando lo pisen.” Emiliano Zapata.

JOSÉ CARLOS GONZÁLEZ BLANCO

La semana ante pasada, nos estremecimos un día, con el homicidio de Emiliano, un niño de 12 años, tabasqueño asesinado de 3 tiros.

Las primeras versiones de testigos dijeron que aconteció defendiendo a su madre de un secuestro; fue grabado gritando ¡No me quiero morir!, ¡Quiero vivir! y murió.

Pasó el día y todos seguimos en nuestra normalidad, como si nada, después de todo, ¿Que podíamos hacer? más allá de sentir un estupor momentáneo y dar paso que el evento se vaya desvaneciendo de nuestra memoria.

Le cuento más de este asunto, pa’que sepa algo más de nuestra sociedad.

Sobre ese hecho, el gobierno explicó que el niño conocía a los atacantes, que no era secuestro, que iban por su madre, que luego de hablar con él, forcejearon, se desesperaron y le dispararon.

En esa explicación subyace una justificación de la conducta de los criminales; empero, aunque así hubiera sido, el homicidio no deja de ser atroz, la víctima era un niño.

Desde luego, no han atrapado a los asesinos, la policía de Tabasco no sirve para nada.

En la ciudad de México, el Peje subió el tema a su mañanera y dijo que los medios magnificaron el asunto «para perjudicarnos en tiempos electorales» (sic)

Con exacerbado desprecio dijo «antes callaban como momias»

Pero la historia no paró ahí.

Días después, aparecieron en Tabasco, dos bolsas de basura con restos humanos eran cuerpos recién destazados y había una pancarta que decía, «Con los niños no se metan», en clara alusión al homicidio de Emiliano.

¿Qué significa toda esta locura de muertos y discursos?

1.-          Que los cárteles sí saben quiénes lo mataron y quienes secuestran.

2.-          Que hicieron justicia a su manera, con más delitos.

3.-          Que, dentro de sus prácticas de horror, les molestó que sus competidores mataran niños.

4.-          Que el gobierno no tiene ninguna idea de quienes son ni los asesinos, ni los descuartizados ni los justicieros descuartizadores.

5.-          Que al presidente López Obrador, tampoco le importó y que, en vez de indignarse por el asesinato de un niño paisano, minimizó el hecho, optando por vomitarse sobre los medios de comunicación reprochándoles que antes callaban como momias.

6.-          Que su egolatría, como siempre, le conduce a comprender que todo lo malo que pasa en México, gira en torno a él y que es para perjudicarlo a él y su partido.

7.-          Que, al decir, “perjudicarnos” en el ambiente electoral, se meterá en la elección usando la investidura presidencial, violando la Ley.

Esto es lo que se aprecia a primera vista, pero sobre el asunto, no es lo único que Usted debe saber.

Le contaré la escalofriante realidad que es la que realmente importa.

Los que han callado como momias son el propio gobierno federal.

Sepa que en México han sido asesinados con arma de fuego 4,116 y 463 niños con arma blanca en lo que va del sexenio y ¡Eso no lo sabíamos!

Aún y cuando está en los datos públicos del INEGI, a nadie le ha importado ni ha sido tema.

Estas cifras espeluznantes, no habían sido noticia.

¿Qué significa?

8.-          Que somos una sociedad indiferente, deliberadamente ciega y sorda ante un gobierno de tarados que no paran la violencia, que la fomentan con odios y mostrándose como idiotas discursando que los criminales también son seres humanos y que debemos protegerlos, que hay que acusarlos con sus abuelitas y tratarlos con abrazos y afirmando que si la sociedad se queja es para molestarlo.

Éste, es el gobierno de Morena en Tabasco donde murió Emiliano y en todo México donde mueren miles de niños asesinados con violencia.

¡¿Que no es para dar vergüenza?!

¡¿Con que cara sale Morena a pedir el voto otra vez?!

4,116 niños asesinados a balazos y 460 acuchillados son un universo enorme, equivalen a 2.1 niños asesinados diarios con balas o puñales.

Esos, son los que hoy nos gritan, ¡Quise vivir! y ¡No los escuchamos a tiempo!.

No los vibramos, ni siquiera lo sabíamos, no ha sido tema.

Hágase un favor, por un momento cierre sus ojos y escuche en su conciencia el grito de esos 4,576 niños pidiéndole a Usted  ¡Quiero vivir!, ¡No me quiero Morir!

Duele, hace llorar, estremece, eran niños, eran jóvenes con toda una vida por delante.

Recuerde cómo era su vida plena de ilusiones antes de cumplir 18 y ahora póngase en sus zapatos y véase en una tumba, pudo pasarle a Usted o a alguno de sus familiares.

Por favor discúlpeme, pero escribo esto profundamente sensible por esas vidas que debimos proteger y no protegimos, le escribo desesperado con la angustia de que hoy mismo en algún lado están matando niños a balazos o acuchillados en mi país y eso es de espanto.

Duele la indiferencia, como sociedad, no hemos hecho nada.

¿Nos estaremos haciendo cómplices por encubrir a un gobierno que protege asesinos?

¿Qué tiene que pasar, además de 4,116 niños asesinados a balazos y 460 niños acuchillados para que entendamos que Morena, es un gobierno de idiotas, inútiles que no los protegió?

Duele saber que el Peje, cada mañana bebe café a las 6:00 en palacio, con los responsables de la seguridad quienes en lugar de estar desmañanados perdiendo su tiempo con el protector de los cárteles, debieran estar concentrados en estos temas.

¿No es patético?

Reflexione, ¿En qué clase de sociedad nos hemos convertido con este despreciable gobierno?

Ya cerró los ojos, ahora escuche en su conciencia, los niños muertos, son los que le gritan y le exigen que piense su voto porque hay otros Emilianos que no quieren morir, también quieren vivir.

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