ADOLFO RAMOS ESPINOSA
Para el fiscal mexiquense José Luís Cervantes Martínez ampliar los campos de acción de cooperación, son un tema esencial.
Fortalecer los sistemas de investigación que permitan romper, cancelar y debilitar las redes del narcotráfico, forman parte de un sistema toral. Es una tarea permanente que no admite descanso.
Está visto que en los últimos tiempos, se han podido asestar severos golpes a integrantes de bandas delincuenciales como la Familia Michoacana.
Sin alardes ni estridencias, la Policía de Investigación y el equipo de ministerios públicos han conseguido no sólo desmantelar laboratorios donde se procesan narcóticos y confiscar tanto drogas como armamento usado por los delincuentes.
Más allá de los trabajos policiales, la búsqueda de laboratorios y sitios donde se procesan drogas y enervantes, tienen como principio básico, dar certeza a la sociedad de que se combaten esos ilícitos.
Cervantes Martínez tiene claro que su tarea al frente de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, no es la de colgarse medallitas o figurar en acciones mediáticas.
Al revisar su formación y carrera profesional, llama la atención que busca, quiere y demuestra trascender con acciones ininterrumpidas para garantizar la tranquilidad de quienes residen en el Estado de México.
En medio de ese panorama, debe encuadrarse la reunión que tuvo con el embajador estadounidense Kenneth Salazar y miembros de la representación diplomática, entre los que seguramente se incluyeron mandos de la DEA y el FBI.
Está claro que no fue una visita protocolaria más, que aun cuando la información que trasciende relata una visita de cortesía, el asunto es más profundo.
Quienes conocen esos niveles diplomáticos, saben perfectamente que hay acuerdos de cooperación y que deben existir motivos de fondo para que Ken Salazar haya destinado parte de su agenda para entrevistarse con el Fiscal General del Estado de México.
Cervantes Martínez en su experiencia laboral en el Gobierno Federal incluye cargos en la Dirección en Jefe para Asuntos Especiales y en la Dirección General para América del Norte dentro de la Secretaría de Relaciones Exteriores de 1998 a 1991.
Y en la Procuraduría General de la República desarrolló actividades laborales en la Agregaduría Regional en San Antonio Texas en EEUU, en la Agregaduría Legal en Washington D.C. también en EEUU, en la Agregaduría Legal para la Unión Europea y Suiza así como en la Agregaduría Legal para Centroamérica con Sede en Guatemala entre 1992 y el 2009.
También en la Secretaría de Gobernación fue Coordinador General de las Fuerzas de Seguridad Pública para el Estado de Michoacán del 2014 al 2015.
Visto objetivamente, la entrevista con el embajador norteamericano no es producto de la casualidad ni una tarea para llenar la agenda laboral.
Seguramente más adelante habremos de enterarnos de que con la visita del embajador Ken Salazar y el equipo del que se hizo acompañar, podrán traducirse en acciones que permitan combatir con mayor eficacia la lucha contra el crimen organizado.
Estas visitas y estas conversaciones generalmente tienen un efecto que en el mediano y corto plazo pueden convertirse en hechos concretos que rebasan la diplomacia y el protocolo.
Tiempo al tiempo.