GERARDO CONDE. Hoy, la Línea “Dorada”, conocida también, como línea 12 fue diseñada para mostrar a los capitalinos y a los que gobiernan la Ciudad de México desde 1997, qué es posible obras de esta magnitud para expresar una visión moderna de país.
En otras palabras, estar a la altura de la generación de los “milenium”, que demandan servicios públicos innovadores.
Bajo esa lógica, el entonces Jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard, apostó por obras públicas no solo faraónicas, sino nuevas y funcionales, más allá de la restauración del Centro Histórico y la edificación de los segundos pisos, qué impulsó su jefe López Obrador, en la Ciudad.
En la perspectiva de Ebrard era dar un paso mayúsculo a favor de su proyecto político: verse como el candidato presidencial del 2012.
Pero, a pesar de sus esfuerzos mediáticos por distinguirse como el gran estadista del siglo XXI, al inaugurar la línea 12 con Felipe Calderón, no le alcanzó para superar en popularidad a su jefe López Obrador en las encuestas internas de su partido, el PRD, en la definición de la candidatura presidencial.
Pero, no solamente no logró su objetivo político, sino que tuvo que emigrar a Francia y refugiarse en ese país, para evitar que su sucesor, en la Jefatura de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, pusiera en riesgo su libertad personal, como resultado de las fallas que afloraron en la línea 12 en el tramo de las estaciones de la demarcación de Tláhuac, en perjuicio de sus habitantes.
Desde la administración de Mancera, ya se advertían estudios técnicos que ponían en entredicho la pulcritud de la línea dorada.
A partir de entonces empieza la pesadilla de Marcelo Ebrard y de Claudia Sheinbaum, ante el asombro de su jefe, López Obrador, por el derrumbe de la estación del metro Olivos, de la línea 12, donde murieron 26 usuarios, el pasado 3 de mayo del 2021.
A un año de distancia, los resultados técnicos y legales, se han quedado a bajo de la alfombra de la impunidad a pesar de los dichos del inquilino de Palacio, de dar respuesta sin ambages, quién o quiénes son los responsables de la tragedia del metro.
Finalmente, los hechos hablan.
López Obrador, en su papel de Mesías, se ha convertido en Ministerio Público y en Juez, y ha exonerado a los involucrados.
A un mes de la elección del 2021, Morena y su candidato a la Alcaldía de Tláhuac, mantuvieron la posición, ante el miedo y la impotencia de la ciudadanía, al imponerse el voto clientelar.
A Carlos Slim, por reparar el daño del tramo afectado de la línea 12, sin costo al Gobierno de la Ciudad, por su bondad, lo libera de cualquier responsabilidad y le aplaude su compromiso con la Ciudad, finalmente, le reconoce en las mañaneras su calidad de “mecenas” a favor de la 4t.
A Marcelo Ebrard, alentándolo como corcholata para que aparezca con su sonrisa de aspirante en los templetes de los candidatos a gobernador en las seis entidades a celebrase el primero de junio.
Pero, además del guion impuesto por su jefe, es sujetarse a la máxima: calladito se ve más bonito.
A su otra corcholata, a la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, le puso una tarea más complicada, negar el estudio técnico formulado por la empresa DNV, experta en riesgos estructurales.
Y mostrarse ante la opinión pública como víctima de intereses mezquinos que quieren descarrilar el proyecto de la4t.
Si es necesario, tendrá qué decirle a la firma de Noruega:
“que el que paga manda y solicita los trabajos a modo”.
Rematando el inquilino de Palacio que todo es politiquería y el que está atrás de esta campaña de difamación en contra de la Jefa de Gobierno, proviene de la organización Mexicanos Contra la Corrupción, dirigida por Claudio X González
Ante esa realidad el inquilino de Palacio, dirá: tengo otros datos, no somos iguales y, por tanto, seguirá imperando durante la 4t:
“La República del Cinismo”
Para reiterar, no me salgan: “conque la ley, es la ley”. Pamplinas
Ante este escenario adverso que lo pone contra la pared, el inquilino de Palacio impulsa y se apoyará una vez más: en la estrategia de la “inercia” para desactivar la bomba del desprestigio público de su Gobierno y de sus corcholatas, para seguir jugando con la sucesión presidencial conforme a sus intereses “perversos” que allanen su objetivo:
Tener el control de la elección presidencial del 2024.
Ya se verá.
Facebook: Trajes a la Medida, Costura Política.
Twitter: condeg862