JOSÉ GARCÍA SEGURA. Hace 54 años, pobladores de San Miguel Canoa, una comunidad indígena distante 12 kilómetros de Puebla, capital, asesinaron a tres empleados de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, así como al dueño de la casa que les dio albergue.
Crónicas de la época refieren que los muertos (Lucas García, Odilón García, Ramón Gutiérrez y Jesús Carrillo, fueron masacrados tras ser señalados por el sacerdote del lugar (Enrique Meza Pérez) como promotores del comunismo.
14 de septiembre de 1968.
Movimiento Estudiantil.
Cinco trabajadores de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) habían ido de excursión al cerro de la Malinche.
Al caer la noche y por la intensa lluvia se refugiaron en la casa de un vecino, enemistado con quien advertía la presencia de comunistas que intentarían instalar una bandera rojinegra en su parroquia.
Cito lo que medios de prensa publicaban entonces: …comunistas que, con su bandera “roja como el infierno, negra como el pecado” insultaban a Dios y a la Patria.
Armados con machetes, palos y antorchas, los de Canoa masacraron, hace más de medio siglo, a cuatro trabajadores.
El viernes 10 de junio de 2022, pobladores de Papatlazolco, una comunidad indígena de la sierra norte de Puebla quemó vivo al joven Daniel Picazo, quien fuera secretario particular de una diputada federal mexiquense tras confundirlo con un “robachicos”.
En redes, una mujer escribió: “la forma en que te arrebataron la vida me provoca la mayor repulsión hacia la gente que injustamente lo hizo”
“vuela muy alto mi Dany. Confío en que Dios hará justicia a toda esa gente que te cortó las alas… sólo por estar en el momento y lugar equivocados”.
El crimen en Canoa, Puebla, quedó impune.
El linchamiento en Papatlazolco, Puebla, sigue sin justicia.
La violencia en Hidalgo o Veracruz, en Guerrero, Colima o Michoacán; en …sigue impune.
La masacre de 1968 en Canoa, Puebla y el linchamiento de 2022 en Papatlazolco, Puebla, tienen un denominador común y provocan, además de indignación, una condena enérgica, por lo injusto.
¿No cree usted?