JUAN GÓMEZ
(Zacatecas). El domingo el partido Morena definió las reglas de la elección, pero el presidente impuso las suyas durante una cena la semana pasada, de donde salió la decisión de renunciar a cargos y solicitar licencias legislativas, en tanto la oposición observa pasmada, reactiva, el manejo de la estrategia presidencial.
Este día, 11 de junio, el camino está pavimentado para que Morena proponga su candidatura y la torre se desmorone en los estados, 23 bajo las siglas guindas el próximo año, cuando se renueven los poderes Ejecutivo y Legislativo, (128 senadores y 500 diputaciones) así como nueve gubernaturas y 30 congresos estatales.
Las miradas de gran parte de la ciudadanía en general están puestas en la narrativa presidencial, en sus “corcholatas”, en el discurso mañanero, ese que dicta la agenda, denosta a opositores, se burla de quien le viene en gana; arremete contra el gobierno peruano y construye los dogmas cotidianos.
¿Cómo van en las encuestas los aspirantes morenistas?
De acuerdo a la medición que presentó El Financiero esta semana que concluye, la lista de preferencia entre los aspirantes de Morena-PT-Verde, la encabeza Claudia Sheinbaum con 34%; en segundo lugar, Marcelo Ebrard, con 18%, el tercer sitio lo ocupa Adán Augusto López, con el 10%, y el último lugar lo disputan Gerardo Fernández Noroña, 7% y Ricardo Monreal, 6%.
Indudablemente quien despunta con opinión favorable es la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México con 49%, en tanto que el todavía canciller, Marcelo Ebrard, registra 35% y quien se mantiene en tercer lugar es el Secretario de Gobernación, Adán Augusto López, con el 27%.
Mientras tanto, la oposición no encuentra candidato ni candidata, suman los votos del resultado de las elecciones del estado de México y Coahuila y se muestran “optimistas” porque las cifras tienen una diferencia de 1.55% y dicen que “hay tiro” para el 2024.
Lo que es real es que les han robado la iniciativa en todo y no encuentran el instrumento que entusiasme a la ciudadanía que no salió a votar en Edomex, por ejemplo, en donde se registró un abstencionismo del 50 por ciento.
¿Cómo lograr vencer la apatía, la falta de compromiso cívico del ciudadano, el miedo a perder los programas sociales y las becas?
Morena tiene una estructura de 23 gobiernos estatales, el PAN, cinco gubernaturas, Movimiento Ciudadano, dos y el PRI solamente una, la de Coahuila, lo que le convierte a este último, en un partido regional y a punto de desaparecer de la esfera nacional electoral.
Lo anterior se traduce en lo siguiente: Morena gobierna al 71 por ciento de la población, o sea, 90 millones de mexicanos, tiene bajo su control al Instituto Nacional Electoral y la estructura de los Servidores de la Nación, además de los partidos satélite de la alianza PT y Verde.
A finales del mes de mayo el presidente López Obrador reunió a los 22 gobernadores de su partido, para instruirlos en la estrategia electoral: operar con todo para ganar la elección del Edomex. Ese fue el ensayo para el 2024.
“A mí no me vengan con que la Ley es la Ley” dijo en su momento el presidente para ilustrar que el fin electoral y político justifica los medios. Así de simple.
La escuálida oposición partidista carece además de liderazgos. Sus impresentables dirigentes, Marko Cortez del PAN, “Alito” Moreno del PRI y Jesús Zambrano del PRD, nada tienen que hacer en la conducción de una estrategia electoral nacional.
La semana pasada en el noticiero Ciro por la Mañana que se transmite en Radiofórmula, se abrió la posibilidad de que su colaborador, el senador Germán Martínez, pudiera encabezar una eventual candidatura presidencial y de inmediato, empezaron a llegar una cantidad importante de mensajes para apoyar la espontánea iniciativa.
Se requerirá frescura y un líder coherente que motive; fortaleza emocional e inteligencia, para derrotar al cinismo autoritario que gobierna, entre otros factores.
Al tiempo.
@juangomezac