MARTHA CANSECO GONZÁLEZ (SemMéxico, Pachuca, Hidalgo). Dice Wikipedia, “La libertad de expresión es un principio que apoya la libertad de un individuo o un colectivo de articular sus opiniones e ideas sin temor a represalias, censura o sanción posterior” “La libertad de expresión implica poder comunicarnos y expresarnos libremente que es un derecho fundamental para vivir en una sociedad justa y abierta en la que se puede acceder a la justicia y disfrutar de los derechos humanos”.
Yo añado que por supuesto, la libertad de expresión es fundamental en cualquier democracia que se precie de serlo. También que es obligación del estado garantizar ese derecho.
Sin embargo, en nuestro país estamos viviendo tiempos realmente muy obscuros en este tema. Según ARTICLE 19 del año 2000 a la fecha 157 periodistas han sido asesinados en México a causa de su labor periodística. Sólo en los 5 años de gobierno de López Obrador 37 periodistas han sido masacrados.
Por cierto, que no ayuda para nada la decisión presidencial de señalar, cada vez que puede, a las y los periodistas que no se dedican a alabar a su gobierno, no acepta la menor crítica, aunque esa opinión esté bien fundamentada.
Ahora a esa complicada situación se suman estos grupos anónimos que están tratando de aniquilar la libertad de expresión, como el que la semana pasada, hackeo la página de SemMéxico.
A invitación de mi compañero reportero de la Jornada Hidalgo, Jorge Romero, tuve la oportunidad de platicar con uno de sus grupos de estudiantes de periodismo de la UAEH, sobre la plataforma de SemMéxico, la trayectoria de Sara Lovera y las implicaciones de este ataque y amenaza que, por supuesto, nos concierne a todas y todos los que participamos en ella.
Si bien la amenaza que profirió el grupo, pareciera ser de la ultraderecha, sobre todo por aquello de que se detentan los defensores de la religión y de la patria, pues no necesariamente, digo, ahora la “izquierda” de MORENA se parece demasiado a la ultraderecha, vamos es demasiado conservadora.
El mismo López Obrador es totalmente conservador, ¡no dijo que son las hijas pequeñas las que habrán de cuidar a los padres ancianos! ¡el machismo-leninismo en todo su esplendor!, sobre todo cuando sabe que en el programa Pro-Equidad que se le presentó hace años, se plantea una revolución de los cuidados, de ahí que la iniciativa no haya prosperado hasta el momento.
Recordar también que en los documentos que dio a conocer Guacamaya liks, luego de hackear a la SEDENA, se supo que los militares espían a diversos grupos feministas, en SemMéxico, nos identificamos como una plataforma de periodismo feminista.
Cuando les pedí a las y los estudiantes que reflexionaran sobre el objetivo de hackear una plataforma de periodismo feminista, fue muy interesante escuchar sobre todo a las jóvenes decir que por supuesto, nos quieren a todas las mujeres calladas y soportando sumisamente la violencia en nuestra contra y que asumamos obedientemente el vasallaje masculino.
Señalar aquí, que la violencia de género cumple un objetivo social y cultural, controlar y dominar a las mujeres, las adolescentes y las niñas.
Pero, bueno, las investigaciones continúan, deseo de verdad que se trate de una inocentada y que no sea el principio del fin de la libertad de expresión en nuestro país.
Mientras tanto quiero reconocer aquí, la valentía y la convicción, no sólo de mí querida Sara Lovera, sino de todo el equipo de que las cosas se están bien y de que el trabajo habrá de continuar.
¡Larga vida a SemMéxico!
Yo me niego a autocensurarme y seguiré escribiendo como siempre, con mi “muy particular estilo” como me lo califican algunas y algunos de los lectores.