Entresemana Información entresemana que forma opinión
>> Anexa documento propio de “coincidencias y diferencias” con el impulsado por la Conferencia del Episcopado Mexicano con la suma de instituciones y organizaciones y actores sociales
Ciudad de México, 11 de marzo (entresemana.mx). Claudia Sheinbaum Pardo, candidata presidencial del oficialismo Morena-PT-PVEM regateó su firma al Compromiso Nacional por la Paz impulsado por la Conferencia del Episcopado Mexicano con la suma de organizaciones, instituciones y actores civiles pese a estar desprovisto de siglas políticas y en aras de apisonar la civilidad en la ruta rumbo a los comicios del 2 de junio próximo.
Sheinbaum leyó un pronunciamiento en el que refiere haber leído “con mucha atención el texto emanado del “Diálogo Nacional por la Paz”, sus siete capítulos y sus 132 propuestas”.
Se congratula por saber que “tenemos coincidencias, sobre todo la de superar la visión punitiva de autoritarismos y decretos de guerra, y avanzar a una visión de construcción de la paz atendiendo las causas”. Pero…
Aduce que, por honestidad y congruencia, firmé el documento con la siguiente leyenda:
“Firmo el documento en el entendido que hay una visión conjunta de construcción de la paz. Sin embargo, hay diversas afirmaciones y propuestas en las que no coincido y a la firma del presente debe anexarse el documento denominado: Sigamos dialogando: Coincidencias y diferencias con el documento “COMPROMISO POR LA PAZ Estrategias de Política Pública por la Paz” de la Conferencia del Episcopado Mexicano por Claudia Sheinbaum Pardo, candidata a la Presidencia de la República por la coalición “Sigamos Haciendo Historia”. Aquí se los comparto:
“Sigamos dialogando Coincidencias y diferencias con el documento “COMPROMISO POR LA PAZ Estrategias de Política Pública para la Paz” de la Conferencia del Episcopado Mexicano”.
En este tenor gradeció al Episcopado Mexicano el documento “Compromiso por la paz”, elaborado con el propósito de seguir construyendo paz y justicia en el país; reconoció los esfuerzos que las distintas iglesias, en particular la católica, así como otras instituciones, organizaciones y actores sociales han hecho para atender las causas más profundas que provocan la violencia en algunas zonas del país.
Consideró “loable que busquemos puntos de acercamiento y diálogo que nos permitan construir acuerdos y espacios de participación de los diversos actores de la sociedad. En ese sentido, estoy consciente de la necesidad de conjuntar esfuerzos para encontrar alternativas de paz y no de violencia en la sociedad, por supuesto, en estricto ejercicio de la soberanía nacional y con respecto al marco constitucional y legal del país”.
