ANA LYDIA VALDÉS
El tradicional cubículo de oficina está siendo reemplazado por un espacio de trabajo dinámico y colaborativo espacio de trabajo dinámico y colaborativo. Se trata del coworking, un espacio compartido, físico o virtual, donde profesionales independientes, empresarios o empleados realizan sus actividades laborales. Es de los pocos segmentos económicos que crecieron con la pandemia y que llegó para quedarse; es innovadora, sostenible y rentable. Los costos rondan entre los 53 y 58 pesos por día, según datos de la App Passwork, con acceso a la red más exclusiva de espacios de trabajo en México, Estados Unidos y Latinoamérica. Otro esquema de pago está entre los 180 y 200 dólares mensuales por -escritorio-.
Los espacios compartidos nacen en 1999 cuando Bernie DeKoven – un diseñador de juegos y escritor americano – lanzó el término “coworking” para identificar de alguna manera los espacios para trabajar juntos, pero de forma independiente. De acuerdo con Mario Granillo, vicepresidente de Innovación y Desarrollo de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI), el coworking es el espacio deal para quienes cuentan con la modalidad parcial o total de teletrabajo, así como para Pequeñas y Medianas Industrias (Pymes) o startups que surgen cada día. Y, a medida que crece la competencia, ya hay algunas en las que puedes llevar a tu hijo, a tu perro, tomar fotos o grabar un podcast. Otras te ofrecen, incluso, domicilio fiscal.
Nunca cerró
Tras la pandemia de COVID-19, el crecimiento fue mayor a lo esperado. “Tanto empresarios como trabajadores empezaron a desarrollar una elevada preferencia por el trabajo híbrido y adaptativo, esto es, tanto en casa como en oficina”, expuso Ramón García Quintana, Country Head de Comunal México, red de oficinas coworking ubicadas en zonas exclusivas de la CDMX. Empresas que rentaban oficinas bajo el esquema tradicional voltearon a ver la conveniencia de alquilar espacios para trabajar sin necesidad de inversión. Locales y oficinas tradicionales que habían bajado la cortina durante la pandemia se reconvirtieron en espacios compartidos y el coworking nunca cerró. “Hoy tenemos más demanda que nunca, ocupaciones muy altas a tarifas muy sanas”, aseguró Quintana García. Comunal está al 93% de ocupación con una demanda creciente. Se estima que el coworking hoy tiene una penetración del 2 a 2.5% del universo de metros cuadrados de oficina en la Ciudad de México. Esto se replica en Monterrey y en Guadalajara en menor escala. Sin embargo, en ciudades mucho más desarrolladas del mundo esa cifra ya alcanza el 12 por ciento.
Claramente hay una tendencia hacia el trabajo híbrido con soluciones que permitan a las empresas concentrarse en el ‘core’ o razón de ser de su negocio y no en operar una oficina.
¿Menos m2 de oficinas tradicionales?
Los costos de renta en estos espacios son una realidad variable. En zonas de alta demanda los costos están al alza; más elevados de cómo estábamos hace dos años, pero por debajo que previo a la pandemia. ¿Cuánto le cuesta a una empresa tener oficinas propias, pagar renta fija, amueblarlas y operarlas? contra ¿Cuánto se ahorra al no amueblarla, no operarla y simplemente pagarle a un tercero para que lo haga? Una empresa con 100 empleados, por ejemplo, puede optar por esquemas mixtos de presencialidad. Contrata 50 espacios y los empleados acuden en determinados días, porque mediante esquemas rotativos, unos acuden a la oficina y otros trabajen desde casa. En estos espacios la tecnología ha avanzado a tal grado que los clientes pueden avisar qué día van a estar en los espacios y reservar la sala de juntas o la ubicación deseada, así como el cajón de estacionamiento. Al final, el costo es menor al que se pagaba por una oficina en el esquema tradicional.
Coworking turístico, la tendencia
Si bien los nativos digitales son personas con “chip tecnológico-colaborativo”, cada vez más se ven Baby Boomers en espacios de coworking, que buscan la colaboración social y profesional entre empresas. En tanto, los nativos digitales disfrutan mucho estos espacios porque los proveen de posibilidades colaborativas de trabajo. De hace diez años a la fecha ha cambiado el diseño de los espacios, ahora son más eficientes y atractivos con amenidades que incrementan la productividad. El consumo de espacios compartidos se ha vuelto tendencia en las grandes ciudades turísticas, donde nómadas digitales extranjeros que vienen a trabajar a México y buscan destinos vacacionales para trabajar. Lo que tradicionalmente se llama Business Center en los hoteles se está convirtiendo en un espacio innovador de coworking y por tanto, hay una tendencia transversal con clientes de todas las edades, gustos y nacionalidades en busca de espacios laborales.