JUAN CHÁVEZ
Ignoro en qué consiste el llamado proceso electoral iniciado el pasado 7 de septiembre.
La cuestión es que tanto Xóchitl como Claudia, investidas como “coordinadoras”, están actuando ya como si estuvieran en abierta campaña.
¿Es bueno o malo?
No respetar los tiempos electorales que formalmente comenzarían el 5 de noviembre, nos lleva a un estirado espacio en la cruzada, ya larga de por sí con sus 90 días oficiales (tres meses), por alcanzar la Presidencia de la República.
Es sano para México y su democracia, que la alternancia de género en la Silla del Águila, esté garantizada con la competencia electoral Claudia Sheinbaum-Xóchitl Gálvez
Finalmente, alguien que llegará a Palacio Nacional entiende el valor de las habilidades tecnológicas, porque ambas contendientes fueron dotadas de habilidades técnicas.
Claudia Sheinbaum y Xóchitl Gálvez van por la llave del Palacio Nacional y sería una pena que tal atípica competencia entre mujeres derive en los viejos discursos de campaña, y en lo económico todo termine cayendo en la antigua discusión de un Pemex abierto o cerrado a la inversión privada.
La moderna tecnología, con su extraordinaria desviación hacia la inteligencia artificial, es una materia que debe figurar en las narrativas discursivas de las dos aspirantes.
No solo es relevante el género de las contendientes, sino su preparación académica. Ambas fueron dotadas de habilidades técnicas. Una en ciencia y la otra en ingeniería, lo que supone que finalmente alguien que llegará a Palacio Nacional entiende el valor de las habilidades tecnológicas en la gente. Ahora esas capacidades son aún más importantes.
El jueves, Gálvez subió 11 pisos del edificio aledaño a la sede de la Bolsa Mexicana de Valores para ser entrevistada en las oficinas de Bloomberg. Fue una buena y ágil entrevista llevada por el periodista Juan Pablo Spinetto. Cuestionada al respecto, esta experta en negocios tecnológicos habló de Pemex.
No solo tocó el tema, sino que entró en la polémica de nuevo: quiere permitir a la empresa más grande y polémica del país buscar algún tipo de acercamiento con el capital privado. ¿Qué gana con eso? ¿Cuál es la novedad de ese discurso en el PAN? ¿Qué ha recibido la gente después de tanto debate en la materia?
En lo que va del siglo, los mexicanos han obtenido más de las actividades de fábricas que cambiaron el Bajío o de empresas financieras que colmaron Paseo de la Reforma.
En Estados Unidos las petroleras están devaluadas en el sector laboral, los más jóvenes y talentosos las desechan entre sus opciones. En México, Pemex cada vez tiene menos empleados y varios de los que siguen ahí, se dicen cada vez menos motivados.
Igualmente, los mexicanos más hábiles se van a la actividad manufacturera o a la de los bancos, que corren a su ritmo y no necesitan mucha ayuda adicional.
Poner a México en el siglo de la economía del conocimiento, eso sí es una guerra que hay que pelear. Xóchitl lo sabe y lo mencionó en la entrevista. Claudia debe saberlo también.
Basta meter la mano a la bolsa o al pantalón para entender en dónde están hoy nuestras actividades económicas.
La infraestructura necesaria para que el dispositivo funcione apenas está siendo construida. Si buscáramos una comparación, quizás estaríamos hoy en la etapa en la que los caminos de caballos fueron pavimentados para los coches.
El próximo sexenio deberán de ser impulsados los negocios electrónicos, de transporte, farmacéuticos y aeroespaciales bajo el esquema de las “autopistas” para smartphones, creadas por verdaderas redes de 5G y procesadores de nueva generación tan poderosos que son capaces individualmente de descargar 2 mil 500 películas en un segundo.
Google y Microsoft ya instalan edificios estratégicos en México que albergan servidores que ofrecen ese servicio que llamamos ‘nube’.
Es una carretera invisible, pero existente, que apenas estamos estrenando.
¿No sería más fresca una competencia política en la que estas dos mujeres muestren un futuro brillante en la ciencia en lugar de rascar de nuevo en nuestro pasado petrolero?
¿En verdad ellas quieren que no haya pobreza? Entonces hay que crear riqueza, riqueza bajo la tecnología moderna de los smartphones.
Xóchitl debería centrarse en su plan tecnológico; Claudia debe presentar uno.
En tanto, Ken Salazar, embajador gringo en México, sostuvo en Radio Fórmula que EU no intervendrá en elecciones de México: “Trabajaremos hasta 2030, gane quien gane”.