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JOSÉ SÁNCHEZ LÓPEZ. En las últimas semanas, CLAUDIA SHEIBAUM PARDO, jefa de gobierno, acompañada por la fiscal general, ERNESTINA GODOY RAMOS y el secretario de Seguridad Ciudadana, OMAR HAMID GARCÍA HARFUCH, salió a presumir la seguridad que hay en la Ciudad de México.
Afirmó que es más segura que otras urbes en el mundo, como Nueva York, Nueva Orleans o Bogotá.
“El día que nosotros entramos al gobierno (5 de diciembre 2018) hubo 12 homicidios y el promedio en que llegamos a marzo (2022) es de seis homicidios”, dijo.
La “corcholata”, dizque consentida del presidente LÓPEZ (aguas, porque si alguien no es de fiar es ese señor), indicó que el pico más alto alcanzado en 2019 fue de 5.1 homicidios dolosos en promedio al día, mismos que han ido descendiendo hasta llegar a 1.9 en 2022.
Su jefe policiaco GARCÍA HARFUCH remachó: “el secuestro lo traemos un 80 por ciento abajo, si comparamos con el 2018 a la fecha”.
La fiscal GODOY RAMOS no podía quedarse atrás: “los números a veces nos clasifican secuestro, que son los secuestros exprés que le llaman, que son para obtener efectivo, pero prácticamente el secuestro como tal está desaparecido».
Entonces ¿ya no hay secuestros?
¿Y si acaso los hubiera, qué es lo que pedirían? ¿Rescate en especie?
Y fue más allá, al afirmar que “eso de la puerta giratoria, por lo menos en los delitos de alto impacto, no esté sucediendo en nuestra ciudad».
¿Es decir que de 100 detenidos los 100 son procesados? ¿Cero impunidad?
Esas declaraciones triunfalistas del 17 de mayo serían desmentidas no por opositores, ni por neoliberales o por la ciudadanía que es la directamente afectada por la inseguridad, sino por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), y después, en menos de una semana, por los mismos hechos violentos que se darían tras sus temerarias declaraciones.
De acuerdo al SESNSP, en los primeros 40 meses de la administración de SHEINBAM los homicidios dolosos alcanzaron niveles históricos, comparados en el mismo periodo de los tres gobiernos anteriores.
En esta administración se han registrado 4 mil 36 homicidios dolosos, mientras que en el mismo lapso de MIGUEL ÁNGEL MANCERA fueron 2 mil 717; en el de MARCELO EBRARD, 2 mil 509 y en el de su promoviente LÓPEZ OBRADOR, 2 mil 580.
De acuerdo a esas cifras, aun si no se consideran los feminicidios en el global de homicidios dolosos, práctica que ejecuta el gobierno capitalino para deformar cifras, suman 3 mil 795 casos, que rebasan a los anteriores gobiernos.
El lunes 23, seis días después de las declaraciones de SHEINBAUM, tres personas fueron ejecutadas y una más resultó herida, en el interior de un despacho de abogados en Durango 10, colonia Roma Norte, Alcaldía Cuauhtémoc.
Según las investigaciones, el asesino fue llevado al lugar al menos por otro sujeto, se introdujo al inmueble, subió varios pisos, disparó contra sus víctimas, se apoderó de una valija y huyó.
Con esa perspicacia y sagacidad que caracterizan a la policía capitalina, se aprestaron a decir “se trató de una agresión directa”.
Obviamente
¿O podría calificarse como un hecho circunstancial o fortuito?
Pero en fin, seguramente las estadísticas de SHEINBAUM o la apreciación subjetiva y sesuda de los investigadores, se basan en “otros datos”. ***CON LA MENTIRA SUELE IRSE LEJOS, PERO NO HAY REGRESO.***AU REVOIR.
