>> Declaraciones de la corcholata de carcajada; cuidarán herencia del ganso
MIGUEL A. ROCHA VALENCIA
En su cara le dijeron a la próxima presidenta de México que su partido no velará por los intereses del país sino por el “legado” del ganso tabasqueño. Y para lograr que así sea, estará vigilante su hijo.
Ahí mismo la científica pidió a los morenistas evitar nepotismo y colusión con el crimen organizado y los aplausos fueron sustituidos por sonrisas, socarronas como las del caudillo cuyo vástago Andrés, ungido como secretario de Organización tiró a la basura al advertir que llega al partido para cuidar el legado de su laureado padre, es decir lo contrario a lo solicitado por quien asumirá la presidencia en pocos días.
Pareciera entonces un callejón sin salida 0para quien constitucionalmente heredará la nueva dictadura, pero no, simplemente porque según sus dichos ella misma será guardiana de los fracasos que también son logros de su hacedor.
Pero claro, ella no será la cabeza de la nueva mafia, habrá un gobierno unívoco manejado desde La Chingada donde la nueva presidenta deberá sujetarse al legado del profeta, a su marco legal, sus presiones y desde luego, el mandato que le llegue desde el partido que encarna el todopoderoso de Macuspana.
No tiene para dónde moverse la moteada corcholata ni por el lado institucional ni por el lado partidista en un fenómeno político nunca visto donde la Presidencia será la oficialía mayor de Morena y a través del partido, no sólo se vigilarán los pasos de la titular del Ejecutivo, sino que también le dictarán correcciones y jalones de orejas.
Todo ello por lo que se ve, ya está pactado, fueron las condiciones para abrirle el paso a la candidatura por “encuesta” donde el único votante fue el caudillo de Tepetitán y de ahí, con todo el poder y recursos del gobierno, llevarla a la Presidencia, para que sea ella quien ejecute las instrucciones no del pueblo sabio y agradecido sino las de su mentor, dueño y creador.
Ni siquiera la darán chance de meter mano en las listas de próximos candidatos que serán designados por la tómbola del machuchón tabasqueño, o sea todos le deben todo al cabecita de algodón. Lo veremos.
Y en ese legado que habrá de cuidar y acrecentar está continuar la protección a los criminales que hasta hoy sumaron más de 198 mil asesinatos “oficiales” y se apoderaron de medio país a sangre y fuego logrando la huida de al menos 350 mil mexicanos de sus lugares de origen. Herencia del ganso que seguramente habrán de acrecentar junto con los desaparecidos.
Ahora será peor ya no sólo con un ejército y guardia nacional que son simples espectadores de la masacre de los delincuentes sino con paramilitares persecutores con facultades de policías de investigación y ministeriales. Veremos cuántos de los valientes de hoy se irán a la cárcel o dejarán de pelear cuando sean perseguidos.
De lo económico ya ni qué decir, se cuidará el legado de Pemex, barril sin fondo con pérdidas superiores al billón 200 mil millones de pesos y una deuda “impagable” por arriba de los 105 mil millones de dólares. Y eso que ya no entrega recursos para los estados y recibe financiamiento presupuestal que sin duda hará que pierda grado su endeudamiento, es decir que nadie quiera invertir en la paraestatal más endrogada del mundo.
Uno de los legados más preciados de la 4T o sea del profeta, es la corrupción que fue patentada y adoptada con todo el poder del Estado por el actual gobierno y que seguramente consolidará el siguiente.
Para eso hace falta desaparecer el INAI y todos los demás organismos autónomos, especialmente las comisiones de Competencia Económica, Telecomunicaciones y Energía. Bueno hasta la Auditoría Superior de la Federación será más acotada.
De esa manera se garantiza la opacidad del gasto público que si bien ya se hace impunemente, ahora no habrá filtraciones de cómo se repartirá el botín presupuestal al que sólo están llamados a participar los integrantes del cártel cuatrotero.
No habrá denuncias y si estas surgen no sucederá nada ni por la ASF ni mucho menos por la secretaría de la Función Pública que sólo sirvió en el sexenio del ganso para enterrar abusos desde el poder, corrupción pura.
Igual sucederá con las concesiones y los contratos del sector público con los privados; seguramente brotarán como hongos nuevos aspirantes a contar con medios de comunicación o de generadores de energía, así como se favorecerá la concentración en uno o pocos actores.
Sin duda ese es una de los legados más importantes porque ¿Para qué quieren el poder sino no reditúa? Que le pregunten a los hijos del prócer, sus hermanos, cuñadas, primos y compadres, a Rocío Nahle, a los Robledo, Bartlett, Ovalle, Sandoval y en suma a toda la cúpula morenista que conformaron la nueva mafia.
Ejemplos hay muchos, pruebas se han aportado pero lo más reciente es lo del tren transístmico que se aprobó con consultas exprés, asambleas espurias donde participaron muertos y se hicieron convocatorias dirigidas, nunca abiertas con el despojo descarado a indígenas como con el tren Maya donde las expropiaciones siguen y con ello la destrucción de la reserva ecológica, esta vez con 270 hectáreas bajo el pretexto de obras adicionales y explotación de minerales no metálicos.
Corrupción y más corrupción, por eso votaron 35 millones de mexicanos con la complicidad de 40 millones más que decidieron no acudir a las urnas. Felicitémonos por ello.