Ciudad de México, 29 de abril (entresemana.mx). Los asesinatos de periodistas son un problema “muy importante en América Latina, especialmente en México, que es “uno de los países más mortíferos” para los informadores de todo el mundo, dijo a EFE la directora general de la Unesco, Audrey Azoulay.
En una entrevista con motivo de su próximo viaje a Uruguay, para la Conferencia Internacional sobre la Libertad de Prensa, y después a Chile, Azoulay repasó los problemas del periodismo a nivel global, así como las actividades en Latinoamérica de la organización que dirige.
La conferencia, coorganizada por la Unesco y Uruguay, reunirá a 2 mil personas para discutir especialmente sobre los retos de la prensa en el nuevo entorno digital, como la privacidad, los informadores y las consecuencias para la libertad de expresión.
“Pero desgraciadamente también hay cuestiones que vienen de atrás, como la violencia contra los periodistas”, reconoció.
Según detalló la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) en su reunión semestral en Miami, desde octubre de 2021 han sido asesinados 15 periodistas en América: 10 en México, 3 en Haití, uno en Guatemala y otro en Honduras, y 13 de esos crímenes ocurrieron en los tres primeros meses de este año.
La directora general de la Unesco explicó que en los últimos años la tendencia es que la mayoría de los asesinatos de periodistas ya no ocurren en zonas de conflicto, sino que afectan a informadores que investigan asuntos económicos o el crimen organizado, como el narcotráfico.
Azoulay, recordó a los estados que tienen la obligación de proteger a los comunicadores y de velar por que los autores de los delitos cometidos contra ellos rindan cuentas.
El informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO, por sus siglas en inglés) también resaltó que en 2018 México fue la segunda nación con mayor número de asesinatos a comunicadores, sólo superada por Afganistán, con 13.
Hasta finales de septiembre de 2020, se registraron 39 asesinatos de periodistas en todo el mundo de acuerdo con el informe, publicado en el marco del Día Internacional para Poner Fin a la Impunidad de los Crímenes contra los Periodistas.
De los comunicadores asesinados, tres eran mujeres, 16 vivían en América Latina y el Caribe (31%), 11 en Asia y el Pacífico (30%), siete en los Estados Árabes y cinco en África.
Durante el periodo 2018-2019 se produjeron 156 asesinatos en todo el mundo, de los cuales, 57 se produjeron el año pasado, la cifra más baja en la última década. Sin embargo, el informe destacó que nueve de cada diez ataques mortales contra comunicadores quedan impunes.
En el último decenio, cada cuatro días se ha matado a un periodista y la impunidad de esos delitos sigue prevaleciendo, según el estudio. Hasta este año, el 13% de esos casos en todo el mundo se habían resuelto con un proceso judicial concluido, lo cual representa una ligera mejora, en comparación con el 12% en 2019 y el 11% en 2018.
Por otra parte, el número de periodistas asesinados en países que viven conflictos armados disminuyó considerablemente en comparación con el aumento en las naciones que no los padecen, en donde la mayoría de los crímenes se produjeron al cubrir casos de corrupción, violaciones de los derechos humanos, delitos ambientales, tráfico y delitos políticos.
El informe señaló que las mujeres periodistas son objeto de ataques de género en el ciberespacio y fuera de él, y sufren agresiones que van del acoso y troleo hasta las agresiones físicas y sexuales.
Mientras que los periodistas de televisión constituyeron el 30% de los asesinados en 2018 y 2019, con 47 muertes, seguido por los de radio con el 24% y los de prensa escrita con el 21%.
El secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, destacó en un mensaje que la pandemia de coronavirus ha puesto de relieve nuevos peligros para los informadores, los cuales ya se enfrentaban con otras limitaciones, como amenazas de enjuiciamiento, detenciones, encarcelamientos, denegaciones de acceso periodístico, así como la negativa de investigar y enjuiciar los delitos cometidos contra ellos.
“Cuando se ataca a un periodista, toda la sociedad paga el precio. Si no protegemos a los periodistas, nuestra capacidad para mantenernos informados y adoptar decisiones fundamentadas se ve gravemente obstaculizada.
Cuando los periodistas no pueden hacer su trabajo en condiciones de seguridad, perdemos una importante defensa contra la pandemia de información errónea y desinformación que se ha extendido por Internet”, alertó.
Asimismo, llamó a todo el mundo a unirse a la campaña #EndImpunity, que busca poner de relieve algunos de los riesgos que los periodistas afrontan en su búsqueda por descubrir la verdad.
“Solo investigando y enjuiciando los delitos contra los profesionales de los medios de comunicación se puede garantizar el acceso a la información y la libertad de expresión. Solo diciendo la verdad al poder lograremos que progresen la paz, la justicia y el desarrollo sostenible de la sociedad”, concluyó.
Check Also
Comisiones del Senado aprueban reformas que crean dos secretarías y una agencia
>> Se trata de un “ajuste” en la estructura de la Administración Pública Federal >> …