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*Carlos Gutiérrez Jacinto, gerente de la refinería se niega a atender a representantes de las empresas
Julieta Cruz Palavicini/ Corresponsal
Minatitlán, Veracruz, 10 de mayo (entresemana.mx). Ni la oscuridad, ni el calor, ni la lluvia que este viernes inicio en Minatitlán han hecho desistir del plantón a los empresarios locales, trabajadores y proveedores, quienes tienen ya tres días en las inmediaciones de la Refinería Minatitlán.
Los reflectores de las instalaciones de la Paraestatales fueron apagados por órdenes de la gerencia de la Refinería Minatitlán, desde el jueves en la noche, día que inició el plantón, como medida de represión por parte del Gerente Carlos Gutiérrez Jacinto.
La apatía y el desinterés de Gutiérrez Jacinto por atender a quienes se manifiestan quedó claro cuando el viernes no cumplió la palabra empeñada de recibir a los representantes de las 40 empresas apostadas fuera de las instalaciones de la Refinería más grande de México.
Trascendió que el gerente señaló «que NO es su problema y que se vayan a hacer su plantón a CDMX, total que el puede entrar y salir por cualquier puerta de la Paraestatal para no ser molestado».
Quienes durante 13 meses han prestado servicios solicitados por la Paraestatal, no solo en la Refinería Minatitlán, sino en Complejos Petroquímico Cosoleacaque y Complejo Cangrejera, pese al incumplimiento en los pagos por parte de esta, hoy exigen que les sea liquidado el adeudo por 2 mil 200 millones de pesos.
Situación que los tiene al borde de la quiebra a un gran número de estos prestadores de servicios, por las deudas acumuladas con proveedores con quienes tienen pagos vencidos.
Asimismo, están en riesgo de perder sus empleos la mayoría de sus trabajadores, para quienes el 15 de mayo podría ser su última quincena.
Lo cual dejaría a igual número de familias no solo sin sustento seguro, sino también sin servicios médicos, y de manera inmediata sin posibilidades de encontrar trabajo en el ramo que durante años han estado.
Los trabajadores de estás compañías aseguran que estarán juntos a sus empleadores hombro con hombro luchando por qué les sean liquidados los adeudos poder continuar con sus trabajos.
Por ello pese a la lluvia torrencial que cayó la noche del viernes y madrugada del sábado, no se movieron del plantón, junto a los dueños de las compañías, quienes se turnan para que tengan agua, alimento y un lugar higiénico para ir al baño
