ROBERTO VIZCAÍNO. Luego de dejar fuera de la cumbre los desacuerdos y los paneles por controversias económicas sobre sus políticas de energía, Andrés Manuel López Obrador impuso a Joe Biden y a Justin Trudeau su agenda de programas sociales basados en bonificaciones en efectivo para amplios sectores de adultos mayores, ninis, discapacitados, etc-etc como un mecanismo para contener la migración y el tráfico de drogas hacia Estados Unidos y Canadá.
Dueño del escenario en la conferencia de prensa conjunta realizada en Palacio Nacional, el mandatario mexicano aprovechó tener a su izquierda y derecha al presidente de EU y al primer ministro Canadá, para hacer un recuento de sus programas sociales y la construcción de Dos Bocas y el Tren Maya, como la gran solución para contener la migración regional hacia EU y Canadá.
No desaprovechó el escenario para subrayar que su gobierno ha terminado con la corrupción y para subrayar que las Fuerzas Armadas ni policías sirven ya a la delincuencia y que por el contrario ejercen un gran control en aduanas y puertos, fronteras y regiones para abatir el tránsito y producción de cocaína, marihuana, heroína y drogas sintéticas principalmente el fentanilo.
Bajo la mirada de Baiden y Trudeau, el mandatario mexicano, habló y habló durante casi 40 minutos seguidos sobre lo bien que conduce a su Gobierno en cuanto a seguridad y trato de migrantes y de cómo interviene en Guatemala, El Salvador, Belice y Honduras para impulsar programas similares a los de México a fin de arraigar a los habitantes de aquellos países.
Y, contra lo que indica el flujo migratorio de mexicanos a EU, aseguró que todos sus programas asistenciales que llegan a más de 21 millones de familias mexicanas, han logrado detener la migración de connacionales hacia EU.
Una vez que dio por concluida la conferencia, abrazado de Biden y Trudeau subió las escaleras del patio de Honor de Palacio Nacional para llevarlos a su oficina y despedirse de ellos.
Ya para entonces no los necesitaba más.
Había concluido así la décima Cumbre de Líderes de América del Norte.
Lo que no se dijo en esa conferencia de prensa conjunta fue que en esta cumbre AMLO aceptó recibir y retener en México a los migrantes que rechace EU sobre todo los que van incrementado su presencia como son los venezolanos, cubanos, nicaragüenses y haitianos.
De igual forma el gobierno mexicano endurecerá sus acciones contra la producción y tráfico hacia EU del fentanilo.
LA UNIÓN ECONÓMICA ES NECESARIA EN LA REGIÓN: MONREAL
Una vez que un pequeño grupo de legisladores de EU visitó al presidente de los diputados, al panista Santiago Creel, y de que se habló de ir hacia un trabajo legislativo conjunto regional EU-México-Canadá, Ricardo Monreal, presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado consideró que es necesario ir a un esfuerzo común que derive en un desarrollo en el norte de América.
La unión económica del Continente construiría, dijo, una nueva plataforma para solucionar los grandes problemas de la región, como la desigualdad, inseguridad, migración, pobreza, la degradación ambiental y el cambio climático.
Indicó que desde su perspectiva, la integración y competitividad de la región son el distintivo de la X Cumbre de Líderes de América del Norte, que culminó ayer con un alentador comunicado conjunto de acuerdos amplios.
Estos dos factores, agregó, son importantes para sostener el liderazgo económico actual y ampliar los beneficios sociales, al igual que los frutos de la prosperidad, a nuestros connacionales.
“No solo hablamos del futuro de la economía y la sociedad de México, Estados Unidos y Canadá, sino del conjunto del Continente Americano para lo que resta del presente siglo”.
En ese sentido, dijo, se debe lograr la consolidación de América del Norte como el mayor polo mundial de crecimiento y desarrollo, así como una integración a nivel continental, con la “Unión Económica de las Américas”, que vaya desde Alaska hasta la Patagonia.
Es decir, detalló, implementar un mercado común y preferencial de capitales, mano de obra, tecnologías, recursos científicos, educación, acceso a recursos naturales estratégicos, energía compartida, financiamientos prioritarios y, de ser necesario, hasta una moneda común.
Con esta “Unión Económica de las Américas”, afirmó Monreal, los problemas del continente como la desigualdad, inseguridad, injusticia, migración, pobreza, degradación ambiental y cambio climático, entre otros, tendrían una nueva plataforma de solución, con base en la unión y el esfuerzo comunes.
“Lo soñaron los padres fundadores de la América protestante y lo diseñaron los padres promotores de la unión latinoamericana, con Simón Bolívar al frente. Desde entonces, la felicidad, la libertad, la justicia, la democracia y el bienestar son los ideales de este continente”, subrayó.
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