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ROBERTO VIZCAÍNO
Con apenas una semana antes de que se apruebe totalmente la Reforma que impediría impugnar cambios en la Constitución, 8 ministros analizan invalidar parcialmente la controvertida Reforma al Poder Judicial ya publicada en el Diario de la Federación.
Es decir, una Reforma ya vigente en la Constitución.
Apenas trascendió este proyecto del ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá que Ricardo Monreal, coordinador de los diputados federales de Morena y presidente de la Junta de Coordinación Política en San Lázaro, quien se autoproclama como doctor en Derecho Constitucional, y quien se enorgullece constantemente por su cátedra de post-grado en Derecho en la UNAM, convocó a una rueda de prensa para anunciar que la mayoría oficialista en San Lázaro (Morena, PT y Verde) no acatarían esa sentencia.
En total contradicción con la Reforma hoy todavía en trámite denominada de “Supremacía de la Constitución”, con que el oficialismo busca justamente impedir que la Corte pueda procesar impugnaciones a reformas constitucionales, Monreal dijo:
«Verdaderamente yo no creía que se atrevieran a tanto un Ministro de la Corte, un juez o un magistrado, pero eso no nos va a detener, nosotros vamos a continuar legislando y estableciendo límites en la Constitución, para que no se cometan este tipo de atrocidades y de inconstitucionalidades () No (acataremos la resolución), por supuesto que no, no tiene competencia, ni tampoco jurisdicción, ni tiene facultades un Ministro para invalidar una reforma constitucional, está totalmente fuera de legalidad«, subrayó.
Sin embargo, los 8 ministros no pro-oficialistas, al igual que investigadores jurídicos, barras y abogados afirman que sí existen bases y facultades legales para que la Corte eche atrás la Reforma al Poder Judicial.
En ese espacio es que el ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá fue comisionado para presentar un proyecto de resolución sobre varias peticiones de la oposición para anular esta reforma y que por ello ha propuesto invalidar parcialmente la reforma judicial.
En su propuesta el ministro dice que hay bases para invalidar al menos el régimen transitorio de la Reforma al Poder Judicial.
De proceder la propuesta, quedaría sin efecto el cese masivo de juzgadores de distrito y de circuito del Poder Judicial de la Federación que accedieron al cargo mediante la carrera judicial. Tampoco les podría reducir el salario que actualmente perciben.
Y se desecharía el cese de los magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación debido a la violación a los principios de independencia y autonomía judicial.
Alcántara Carrancá plantea además anular la figura de los jueces sin rostro y el método de selección de los juzgadores que llevarían a cabo los Comités de Evaluación.
Afirma que nada en esta reforma al Poder Judicial garantiza condiciones mínimas de seguridad jurídica requeridas en cualquier sistema democrático ni certeza para que los aspirantes a los cargos sean incluidos en las listas ni tampoco para que puedan encontrar equidad en el uso de los espacios públicos ni el tipo de contenido que podría ser objeto de promesa de campaña.
De igual forma, afirma, no existen garantías para que se emita un voto informado.
“… es claro que tanto el sistema de postulación de candidaturas como el sistema de listas generado para la votación, corrompen los fundamentos de nuestra República representativa y democrática», advirtió.
En síntesis, el ministro plantea invalidar el régimen transitorio de la Reforma al Poder Judicial.
Y se desecharía también la obligación a las entidades federativas a instaurar un sistema de acceso a los cargos de personas juzgadoras locales mediante el voto popular.
MONREAL ADELANTA EL ROMPIMIENTO DE PODERES
En su respuesta a lo que todavía no ha ocurrido, Ricardo Monreal, líder de los diputados federales de Morena subrayó que al menos su fracción y sus aliados del PT y Verde no acatarían la sentencia de Corte que anule parcial o totalmente la reforma al PJ.
Dijo que el proyecto del ministro Alcántara Carrancá parte de una «barbaridad inconstitucional» y que someterlo a votación en el pleno de la Corte sería un acto arbitrario de un órgano incompetente.
«Asume un criterio totalmente caprichoso, arbitrario e ilegal, pero eso es normal, se veía venir, yo lo veía con mucha claridad cuando los jueces se atrevieron a emitir resoluciones de suspensión y resoluciones de paralización de la reforma», dijo.
A su vez consideró que el proyecto del ministro Alcántara Carrancá valida el el dictamen de la denominada reforma de la “Supremacía de la Constitución” que está en vías de impedir que se pueda presentar algún recurso de amparo o inconstitucionalidad de reformas a la Constitución.
De no aprobar esta reforma en curso, indicó Monreal, estarían sometidos a un «supremo poder conservador», al que no le importa lo que legisle el órgano reformador.
«El Constituyente Permanente, el poder reformador no puede permitir que un Ministro puede echar abajo toda una reforma producto de un Congreso de la Unión y de la mitad más uno de Legislaturas locales, es obvio que así sucederá, nosotros no nos vamos a detener, habrá elección de jueces y magistrados, porque él no tiene competencia para invalidar una reforma constitucional», insistió.
Con estas posiciones encontradas en dos de los tres poderes de la Unión se va directo al rompimiento del Estado.
Eso es lo que está en curso.
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