JOSÉ SÁNCHEZ LÓPEZ
CADA vez que se le pregunta al presidente ANDRÉS MAUEL LÓPEZ OBRADOR que opina sobre la inseguridad, responde: “No hay nada que temer en México, estamos bajando la incidencia delictiva y son muy pocos los sitios donde hay violencia, muy pocos. México es un país bello y seguro. Todos estamos felices”,
Sólo que el Índice Mundial de Delincuencia Organizada en su Reporte México, tiene otros datos en los que asegura que México ocupa el tercer lugar mundial en criminalidad.
El desproporcionado crecimiento del crimen organizado, precisa, se deriva de la desigualdad económica y social, la inestabilidad política y los conflictos de los últimos cinco años, provocados por la falta de energía para combatir la delincuencia.
¿Abrazos, no balazos?
El informe publicado por la Iniciativa Global contra el Crimen Organizado Transnacional, con sede en Suecia, calificó a México con 7.57 al evaluar la operación criminal en los 193 países miembros de la ONU, a través de 15 indicadores como son: delitos financieros, trata de personas, tráfico de personas, armas y drogas, delitos cibernéticos ambientales y contra la flora y la fauna.
La pasividad de quien debe atacar el fenómeno, permitió a los criminales migrar hacia otras actividades, como la extorsión, el cibercrimen y el mercado negro de bienes.
América Central es el más afectado por el crimen organizado, seguido de América del Sur y América del Norte. En ese plano México es el más afectado por este mercado, alcanzando una puntuación de 9.0.
Eso sí, en lo que no vamos abajo, es en el comercio de drogas sintéticas. La producción de ketamina, metanfetamina y, pese a su negativa, en el fentanilo.
México se encuentra entre los países de América con mayor tráfico de amias, que los cárteles adquieren en Texas v Arizona Estados Unidos. También nuestro país ocupa el primer lugar en el continente en trata de personas.
México se encuentra, a nivel mundial, entre los 10 países en delitos financieros que involucran a instituciones estatales, entidades del sector privado e individuos y la principal preocupación es la malversación de fondos públicos, la evasión fiscal y la corrupción.
Eso es a nivel internacional, aquí en casa el número de homicidios dolosos cometidos durante la administración del presidente AMLO, superan los registradas en las gestiones de sus FOX, CALDERÓN y PEÑA NIETO.
No obstante, LÓPEZ OBRADOR sostiene que los índices en este rubro criminal van a la baja.
Con base en cifras oficiales, es decir de su mismo gobierno, del 1 de diciembre de 2018 al 5 de octubre de 2023 se habían documentado 167 mil 659 homicidios dolosos en el país.
Y a pesar de esos datos, que no son otros, sino del mismo LÓPPEZ OBRADOR, asegura que el homicidio doloso ha disminuido y continúan con la misma tendencia.
¿Alguien, alguno de sus asesores o acaso uno que no sea tan servil, le podría aclara cuál es la verdadera situación o ya de plano, echarle agua fría en su cabecita a ver si reacciona y despierta de su –FINGIDO—letargo? ***CON LA MENTIRA SE LLEGA LEJOS, PERO YA NO HAY RETORNO.***AU REVOIR.