Cancún, entre la vorágine criminal del narco y la apatía gubernamental
JOSÉ SÁNCHEZ LÓPEZ
Las otrora paradisíacas playas de Cancún, que concentran la mitad del turismo internacional en México, con un récord de más de 30 millones de visitantes al año están convertidas en un infierno de inseguridad, donde un día sí y otro también, son asesinados lo ismo narcomenudistas, que empresarios que se niegan a vender droga y hasta consumidores o gente inocente que tuvo la mala fortuna de estar en el lugar y en el momento equivocado.
En Quintana Roo, uno de los principales polos turísticos del país, la violencia ha escalado mes a mes este año. En enero se registraron 64 crímenes, en los 28 días de febrero, 75; en marzo, 80; abril 106 y este mayo 87, para un total de 412 muertes en los 151 días de los primeros cinco meses del año, un promedio de 2.7 asesinatos diarios.
Tales hechos sólo reflejan la inseguridad, el crimen y la violencia que afronta el Caribe mexicano, en medio de secuestros, ejecuciones, enfrentamientos entre miembros de cárteles del narcotráfico.
Simultáneamente con la execrable ola delictiva, se da una pasividad sorprendente por parte de los gobiernos municipal y estatal, una inacción que pretenden justificar con la falta de apoyo de la Federación, el caso es que de una u otra manera los turistas extranjeros y naciones, los comerciantes y los cancunenses en general, un promedio de un millón, entre población flotante y fija tienen que arreglárselas solos.
La macabra lista es larga, veamos:
Tres cabezas humanas fueron abandonadas el lunes 29 frente a las instalaciones del 64 Batallón de Infantería de la Guarnición Militar de Cancún, Quintana Roo, sobre la avenida López Portillo. En el lugar se encontraron mensajes con amenazas dirigidas al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), así como con fotografías de seis personas a las qye advierten que ejecutarán.
El jueves 25, la cabeza de una mujer fue abandonada en una hielera junto con un mensaje en la Playa Punta Piedra en el balneario de Tulum. La mañana del sábado 20 fue descubierto un cuerpo maniatado y con impactos de arma de fuego en el interior de un bote de basura y la tarde de ese mismo día fueron atacadas a balazos tres personas en la zona de El Crucero; entre ellos dos vendedores a quienes se presume iba dirigido el ataque.
El domingo 21 también se registraron hechos violentos, entre ellos el asesinato a balazos de una persona que salía de una peluquería y por la tarde, en otro ataque a mano armada un hombre perdió la vida y otro más fue lesionado de gravedad.
Esos son los casos más relevantes, porque se dieron muchos otros más que por su irrelevancia resultaron intrascendentes.
Hoteleros, restauranteros, antreros, taxistas regulados, comerciantes en general y turistas, señalan que de ser un paraíso del Caribe Mexicano, pasó a ser una película de terror donde en cualquier lugar y momento puede surgir la muerte sin que nadie, NADIE, haga algo por evitarlo.
Los afectados hacen un llamado angustioso a la alcaldesa, ANA PATRICIA PERALTA DE LA PEÑA para que intervenga y no permita que el polo turístico más importante del país, siga en manos del crimen organizado. ***LA INDOLENCIA CAUSA MÁS PESADEZ Y HERRUMBRE QUE EL TRABAJO. ***AU REVOIR.