Dayana Rodríguez
Ciudad de México, 22 de enero (entresemana.mx). Las emociones son naturales en el ser humano, son parte de nuestro ser, todos nacimos para experimentarlas; son un abanico con diferentes sensaciones. Cuando experimentamos el lado positivo puede ser una experiencia hermosa, pero también está su otro lado, es decir las que no son “buenas” y utilizo comillas porque me gustaría explicarte porqué son necesarias.
Vivimos en un mundo donde pareciera que se nos exige ser felices todo el tiempo, pero qué pasa cuando las emociones negativas llegan a nuestra puerta, para recordarnos que también son parte de nosotros, nuestro primer mecanismo será evadirlas, negarlas, buscar cualquier otro distractor antes de confrontar eso que estamos sintiendo, y entiendo que nos son sensaciones muy gratas, pero sí necesarias para nuestra evolución, no podría existir la felicidad sin ellas y viceversa, no sabríamos reconocerla si no existiera este lado.
Estoy aprendiendo muchas cosas en terapia sobre las emociones negativas y te entiendo si huyes de ellas, porque justo es algo que yo suelo hacer, siempre tenemos un montón de cosas que nos permiten evitarlas, pero básicamente es como poner un curita a la herida, tarde o temprano tendrás que hacer algo para sanarlas, porque si no van a regresar una y otra vez, en diferentes formas, e incluso es cuando de repente y sin razón alguna nos empezamos a sentir tristes, incómodos, porque nunca le dimos la atención necesaria.
Pongamos un ejemplo, supongamos que te lastimas el pie y te pones una pomada que lo único que hace es eliminar el dolor, pero no desinflama ni te cura, mientras la uses no vas a sentir nada y puedes decir, “ya se curó solito”, pero en cuanto se acabe la pomada el dolor va a regresar, pero esta vez más intenso, porque al no atenderte a tiempo ya tienes más inflamado el pie. Lo mismo pasa con las emociones negativas, si no escuchamos el mensaje que nos vienen a dar y hacemos todo por ignorarlas, van a regresar y puede ser que de una forma más intensa, porque entonces ya acumulaste más cosas por resolver.
¿Cómo saber si las estas evitando? En mi experiencia es que cuando te empiezas a sentir triste o los recuerdos de algo que son muy dolorosos para ti regresan, inmediatamente dices no, yo no puedo estar triste voy a salir hacer cosas o buscar cualquier distractor antes que escucharlas. No estoy diciendo que debamos tirarnos a la cama y deprimirnos (aunque si es necesario unos días para recargar baterías está bien, siempre y cuando eso no sea algo que se salga de tu control y en lugar de ayudarte te haga sentir peor), pero si sentirlas como tal con toda y esa incomodidad que trae, identifica que siente tu cuerpo, cuales son los pensamientos que llegan, analiza de dónde vienen, date la oportunidad de sentirte mal y saber que eso también está bien.
Una vez que te permitas sentirlas, es momento de dar el siguiente paso sacándolas, puede ser por medio de escribir, hacer ejercicio, hay muchas maneras, ¡ojo! No se trata de desbordarse y que si estás enojado entonces maldecir a todos a tu alrededor, recuerda que los demás no tienen la culpa de lo que estas sintiendo, más bien busca algo que no afecte a otros ni a ti y déjalas salir, para que de esta forma puedas continuar. Hazlo las veces que sean necesario, se amable contigo y sobre todo paciente para saber que estos pasos lo tendrás que repetir, pero si ya sientes que no puedes controlarlas solo, entonces por favor busca ayuda profesional para que te enseñen técnicas para manejarlas de una forma correcta.
Las emociones negativas, deberíamos sentirlas, vivirlas, comprenderlas, para entender el, ¿Por qué me siento así? y de esta forma darle paso a soltarlas para tomar el aprendizaje de lo acontecido. Ten cuidado en no aferrarte a ellas, dándole paso a la amargura, el odio, el rencor, la envidia, el resentimiento.
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¡Qué tengas un excelente domingo!