>> El albazo de Morena no solo apuesta a la militarización de la seguridad pública, es una propuesta ingenua e inconstitucional y así lo reconoció también el presidente. La iniciativa no busca resolver la ola de inseguridad, no detalla la transferencia de recursos entre dependencias y deja en incertidumbre el funcionamiento futuro de la Guardia Nacional._
>> “Hoy hay dos opciones que van a quedar en la historia, o se defiende la Constitución o se traiciona a México. Lo que están haciendo es traición a la patria perpetuando la guerra”, Álvarez Máynez.
Ciudad de México, 03 de septiembre (entresemana.mx). La Bancada Naranja rechaza la iniciativa de Morena para que la Secretaría de Defensa Nacional (Sedena) asuma el control operativo, financiero y administrativo de la Guardia Nacional (GN). El cambio que pretenden es claramente inconstitucional e insuficiente para atender la grave crisis de seguridad. Buscan resolver un problema administrativo, generando incertidumbre jurídica del actuar que tendrá este cuerpo de seguridad en el futuro.
Contrario a lo que afirma el discurso presidencial, esta iniciativa no resuelve la ola de violencia que padece el país ni pone al centro la inseguridad, que es un reclamo urgente de la población. No tiene fines de mejorar la seguridad pública. Se trata de una propuesta ingenua que perpetúa la militarización que esta administración prometió combatir y, más grave aún, impide que México inicie un proceso de pacificación.
“Esta iniciativa ejemplifica que el presidente no propone nada en específico. Es ingenuo discutir esta propuesta. No tiene fines legales ni de seguridad pública, es una medida política. No podemos ser la legislatura que militarizó el país”, señaló el representante Salvador Caro.
Para la Bancada Naranja, el debate de la de la GN parte del debilitamiento de las políticas locales que este gobierno se negó a fortalecer. Tan solo en el último año, este cuerpo de seguridad recibió 65 mil millones de pesos, pero tan solo procesaron a 8 mil personas. En contraste, el último año de operaciones de la Policía Federal (PF), se procesaron 21 mil personas. Es decir, en los hechos su funcionamiento y resultados han sido deficientes.
Morena y sus aliados no solo violan la Constitución. Mienten con esta reforma. Contrario a su argumento de apostar por fortalecer el combate a la inseguridad, al cambiar la adscripción de la GN a la Sedena, ésta pierde toda facultad de detener, investigar y procesar delincuentes al no ser de orden civil. Le quitan certeza jurídica a su funcionamiento.
La reforma es inconstitucional ya que contraviene los artículos 1, 21, 87, 128, 129, 133 y 134 constitucionales, incluidos los artículos quinto y séptimo transitorio de la reforma de 2019 y ha sido presentada como de obvia y urgente resolución cuando realmente no cambia nada para la gente. Además, deja en duda cuál será el destino de los 23 mil elementos de la extinta PF.
La Bancada Naranja presentará una propuesta en materia de seguridad pública que priorice la dignidad de las fuerzas armadas y el fortalecimiento de policías locales bajo un modelo civil, una alternativa para crear nuevas alternativas para el uso de la fuerza, mejorar la condición laboral de las y los policías, y que los obligue a investigar antes de encarcelar.
Desde hace 15 años Movimiento Ciudadano ha defendido el derecho a vivir en un país seguro, ha insistido en construir un nuevo trato por la paz. Hoy, con esta votación, queda claro que Morena no defiende a la Constitución y vuelve a traicionar a México. Seamos claros: militarizar al país es traición a la patria.