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*Sociópata
LUIS REPPER JARAMILLO*. No en pocas ocasiones esta Columna ha abordado el tema peligroso, alarmante, preocupante, temible, aterrador, etc. de la ínfima personalidad de Andrés Manuel López Obrador, desde sus esquizofrénicos deseos de ser Presidente de México (en 3 ocasiones) ya en Palacio Nacional aflora su perverso deseo (convertido en realidad) de venganza contra los mexicanos, toda vez que en su primer intento lo derrota el panista Felipe Calderón, acusó “me robaron la elección”, “ningún ciudadano abogó por mí, no me defendieron de las decisiones del INE” por lo que –de acuerdo a su Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC) de poder por el poder, se auto proclamó “Presidente Legítimo de México” (noviembre de 2006) mostrando su verdadera ínfima imagen: Trastorno de Personalidad Antisocial
A lo largo de su corrupta campaña electorera en 2018, López Obrador arremetió enfermizamente contra el INE, TEPJF, Felipe Calderón, al diablo sus instituciones; contra la Prensa (fifí, chayotera, mafia de la información) que no comulga con sus ideas y cuestiona su “forma” de (des) gobernar. Culpó a los emprendedores, empresarios, inversionistas, triunfadores exitosos, a quienes etiquetó como la Mafia del Poder, Delincuentes de Cuello Blanco, conservadores, neoliberales, traidores.
Ya desde entonces (2006 y antes) Andrés Manuel asomaba los síntomas de SOCIÓPATA, que la RAE describe como “persona que sufre trastorno de personalidad antisocial; enfermedad MENTAL que no demuestra discernimiento entre el bien y el mal. Ignora los derechos y sentimiento de los demás” (Ejem. niños con cáncer, burócratas despedidos, suspensión de las guarderías para padres trabajadores del Gobierno. Desaparición de los comedores comunitarios para indigentes, aniquilación de los Centros Comunitarios de salud y un sin fin de etcéteras)
Además de sociópata López Obrador es PSICÓPATA (egocentrismo, narcisismo, soberbia). Ha demostrado no sentir empatía hacia el sufrimiento, ni remordimiento. El psicópata posee una elevada inteligencia (nunca lo he dudado) que le permite manipular a quienes tiene alrededor (gabinete, colaboradores, larvas, gusanos; leales a ciegas, 90% de lealtad 10 por ciento de capacidad. Ser corrupto es requisito indispensable para ser “mascota” del Sistema) y suele reincidir en sus acciones (lo ha hecho a lo largo de 4 años 2 meses).
Un ejemplo de esta arrogancia fue un discurso populachero en donde escupió: “quien no está con la 4ª Transformación está contra México” lo que quiso esconder fue que, quien no apoya a Andrés Manuel, es su enemigo (manipulación), es decir, pretendió imponer su idea, sin permitir que la ciudadanía discierna, disienta o enfrente a un dictador de pacotilla.
Consulto la página del Centro Nacional de Soluciones a Conflictos de Personalidad, diseñada en San Diego, California por Bill Eddy, fundador del Instituto de Alto Conflicto de Personalidad y pionero de la Teoría de la Personalidad Conflictiva. Encuentro que el sociópata (AMLO) es dueño del desorden de personalidad antisocial (ASPD), que se caracteriza por poseer una fuerza descomunal que le mueve el deseo de dominar a los demás (Monólogo de su Soberbia, desde donde manipula, ordena, mangonea el día a día del país), que conlleva romper leyes (violador número 1 de la Constitución, leyes, reglamentos)
¿Lo recuerda? ¡No me vengan con ese cuento de que la ley es la ley! (López abril 6 2022) Le paso otra (violar leyes) En reunión ultra secreta en Palacio Nacional con miembros de su gabinete, gobernadores, dirigentes de Morena, paleros y chairos, Andrés Manuel mostró su verdadero TOC, cuando ordenó: “hagan todo lo que tengan que hacer, utilicen recursos, infraestructura, personal, logística, parque vehicular, redes sociales oficiales, etc. para ganar las elecciones de 2024. Debemos mantenernos en el poder, sea como sea” (es decir violando leyes). Si no es verdad… ¡así parece! ¿O no, Andrés?
Sigo con Bill Eddy y su análisis de la personalidad conflictiva.
El sociópata (señor López) quiere dominar para obtener cosas de ellos (materiales, pecuniarias, sociales, políticas, voluntades, lealtades) Disfruta dominar a otros ¡sólo por cómo se siente!, por sensación de poder y control.
Sostiene Eddy, el sociópata carece de conciencia, así que hará lo que sea para obtener lo que quiere. Este enfermo tiene personalidad de alto conflicto, ¡que lo digan, porque lo padecemos!
Les expongo 7 tipos de psicópatas que define la Real Academia de la Lengua. Saquen sus conclusiones, ¿cuál o todas reflejan la ínfima personalidad de Andrés Manuel López Obrador, antes de 2018 y a partir de 2018?
Depresivos, inseguros, fanáticos, necesitados de estimación, labilos (que cambia o es poco estable o seguro), explosivos, desalmados. Seguro ya lo saben.
La propia definición académica describe cuales son los síntomas del sociópata, de lo que hemos dado cuenta en la Entrega. Manifiesta falta de conciencia. Viola y falta al respeto hacia los derechos de los demás. Arrogancia, soberbia, complejo de superioridad (yo tengo otros datos. Yo soy el poder, Soy el 2º Presidente mejor calificado en el mundo. Quien no está conmigo, está contra mí, Yo no soy corrupto). Falto de empatía
El sociópata (Andrés) tiene dificultades para lograr empatía o relacionarse sentimentalmente o ser tolerado.
Si no lo ha hecho –porque no le interesa o rechaza- observe algún Monólogo de su Soberbia o un discurso político/populachero de Andrés Manuel, para detectar lo que asegura el diccionario como definición de cómo habla el sociópata:
Sus palabras son mayoritariamente FALSAS. Utiliza conceptos diseñados para cubrir sus mentiras y comportamiento. El sujeto se caracteriza por tener Personalidad Oculta y Peligrosa. No sólo lo sabemos sino lo padecemos a lo largo de 4 años 2 meses… y lo que falta.
¿Qué oras atrocidades cometió, comete y cometerá el sociópata que merodea Palacio Nacional? Líneas arriba cité varias, pero aún existen más, como cuando destruyó (suspendió motu proprio) a través de una encuesta amañada, tramposa, perversa, organizada y cuantificada por él, las obras del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) en Texcoco, bajo la “sospecha” que jamás comprobó, que los trabajos eran respaldados por la corrupción (no hay en la cárcel ningún inversionista nacional o extranjero descubierto por tal ilícito). Mintió y exhibió su complejo de superioridad. No hay terminal aérea en Texcoco, pero si una Central Avionera en la Base Militar de Santa Lucía, pomposamente llamada Felipe Ángeles.
El psicópata Andrés, durante su periplo electorero de 2018 ofreció, prometió, alharaqueó el combate definitivo y la pacificación del país, controlando a la delincuencia organizada, a los cárteles de las drogas, las armas, la trata y la industria del secuestro. A 4 años de distancia, no sólo no erradicó ese cáncer, sino forma parte de él, o ellos dominan al gobierno de la Transformación de 4ª.
Dos casos que pintan tal cual, al delincuente y protector de las mafias en el país: la liberación inconstitucional, ilegal, majadera, desvergonzada de Ovidio Guzmán López (hijo del Chapo), cuando las fuerzas armadas lo tenían sometido para extraditarlo a Estados Unidos que lo reclama. Desde un teléfono celular el Peje marcó a Alfonso Durazo, Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana Federal, que tenía controlado al narco. Autoritariamente ordenó dejarlo libre. El famoso “Culiacanazo” marcó el amorío, amasiato, fidelidad de López con la familia Guzmán López Loera (Chapo, Ovidio, Consuelo)
El segundo caso de Traición a la Patria cometido por el tabasqueño es la defensa enfermiza que hace del reo (en Estados Unidos) Joaquín Guzmán Loera, quien a través de redes sociales pidió (exigió a Andrés Manuel) buscar que su sentencia de cadena perpetua la haga en México, tramitando a través de los canales diplomáticos su extradición a nuestro país, porque en la cárcel de máxima seguridad en el Estado de Colorado, lo tratan muy mal, no le dan comida de calidad, no le permiten visitas conyugales ni familiares; mientras a los otros reos sí. Acusa que no le permiten desde hace 6 meses ver la luz del Sol… ¡pobrecito!
Solícito, obediente, dilecto (lo que no hace con los mexicanos) López dispuso que Marcelo Ebrard, Canciller, jajajaja, ¿canciller? haga lo conducente ante su contraparte norteamericana que agilice los trámites para devolver a México al asesino, capo, perverso del Chapo.
Dijo el merodeador de Palacio Nacional, en EU ¡violan los derechos humanos de Joaquín!
*Colaborador de los Grupos Editoriales Digitales entresemana.mx, metropolihoy.com, pasaporteinformativo.mx, gustavorenteria.mx, latitudmegalopolis.com, portalhidalgo.com
