MIGUEL ÁNGEL LÓPEZ FARÍAS
No hemos aprendido nada…eso nos diría un Gonzalo N. Santos, el cacique de San Luis Potosí quien en su libro «Memorias» nos explicó lo que es y sigue siendo la política a la mexicana.
Los mexicanos, somos herederos de una vieja tradición en la que las cosas más importantes, sea en el imperio mexica, la nueva España, el par de emperadores o la república son resueltas por un solo hombre, el tlatoani de todos los tiempos, el padre, aunque ausente, es el que manda.
Y aunque vivimos con un guion democrático, es más de buenas intenciones. Basta revisar la historia, mirar cómo es que este país se reinventa cada seis años sin alcanzar el fin a la pobreza, a la inseguridad o la desnutrición intelectual.
¿Qué sucede cuando el cuerpo mexicano es alimentado con política chatarra? Crece anémico, incapaz de resolver su futuro. ¿Por qué han tenido éxito los presidentes populistas en esta nación, desde Santa Ana, hasta López Portillo o este otro López?
El mexicano promedio busca la recompensa inmediata en la política y si el vendedor de estás las endulza con promesas, claro que acudirá a elegirlo… si es la venganza y fin de todos los males de estos pobrecitos mexicanos, por supuesto que votarán las vísceras y no el cerebro .
Esta es la verdadera faramalla, de ahí se alimenta la corrupción y esta grosera impunidad que nos enferma.
Y tampoco debemos quebrarnos la cabeza para concluir que en el siguiente proceso electoral se repetirá la misma receta, un presidente -jefe de campaña dividiendo a los mexicanos y explotando el rencor… López Obrador ha demostrado una enorme habilidad para desarticular a la oposición, sus etiquetas mañaneras son el «San Benito» y le funciona, los que él señala son enemigos del pueblo, así se ha ido «desayunando» a todos sus enemigos.
Aquí es donde entra la vacuna, una mujer que, todo indica, será la candidata del Frente Nacional por México, Xóchitl Gálvez, senadora, hidalguense, un personaje de la misma caterva folklórica que tanto gusta a los mexicanos.
Mal hablada, directa, ágil de mente, con un buen olfato para encontrar oportunidades y sobre todo: mujer.
¿Y no existen mejores fichas en la oposición para enfrentar al presidente y su maquinaria de billetes y gobierno? Por supuesto, mentes brillantes y currículums universales, pero no son los que el momento reclama, se busca «una sopa de su propio chocolate» y es Xóchitl la que, dado su perfil, es capaz de despertar a los electores que no ven cómo sacar a Morena de palacio.
Xóchitl se viene transformando en la nueva «Paquita la del barrio», recuerden esto que aquí advierto, su concierto será dedicado a esa «rata inmunda, animal rastrero»… y cosas de ese tipo.
Eso es lo que, desesperados, se busca en la oposición hacerle mella a como dé lugar al mandatario y su proyecto, y lo mejor es que les podría funcionar, pues para quien conozca los resortes que mueven a el grueso de los mexicanos, sabrá que la democracia con pastelazos y mentadas es mucho más atractiva, aunque nos lleve a la ruina.