MIGUEL ÁNGEL LÓPEZ FARÍAS
Usted que me ve, que me escucha, ¿es padre de alguna niña o niño?, ¿es abuelito?, ¿tiene nietos pequeños?, ¿qué edad tienen?, ¿seis, siete, ocho…12, 15? Le pido cierre los ojos y piense que de pronto alguien los sustrae, desaparecen, de un momento a otro ya no corren por la casa, ahí, quietos sus juguetes, se dejan de escuchar sus videojuegos, el perrito o el gato de la casa observan sus ausencias…estos niños y niñas ya no aparecerán jamás . Y no espere que alguien llame para pedir rescate, no es un secuestro de los de antes. Simplemente nuestras criaturas se evaporaron. ¿Siente, aunque sea por un segundo, esa sensación de vacío en el estómago?, ¿cree usted poder irse a la cama con la taladrante desesperación de no saber algo de ellos?, ¿sabía usted que nuestros hijos e hijas son potencial mercancía del mercado de venta de órganos o de la poderosa red de prostitución infantil que opera en el mundo? No lo voy a abrumar con fríos datos, solo bosquejaré algunas gráficas, el tráfico infantil en el mundo supera en generación de ganancias al tráfico total de armas o de drogas…en el mundo.
Lo dijo uno de estos enfermos, vender niños o niñas es mejor que mover cocaína, un kilo de esta se vende una sola vez, en cambio, ofrecer a un niño puede a generar ganancias constantes…un pequeño o pequeña llegan a ser «utilizados » hasta 60 veces en un día.
Las organizaciones que secuestran, guardan, trasladan y ponen en el mercado a estos pequeños gozan de la más brutal protección de gobiernos y autoridades, son muchos millones de dólares los que permite que de esto no se hable.
¿Cómo se puede sacar de una frontera a un ser vivo, a un niño o niña sin que sea detectado? De la misma manera con que las líneas migratorias se mueven, con autoridades corruptas.
Una pequeñita del estado de México puede llegar a tener como destino algún país europeo…su futuro es uno solo, servir como objeto sexual, como pequeña actriz porno y al final, cuando ya no les sea útil, extraerle sus órganos.
En el planeta no existe un solo esfuerzo serio, multinacional, que ataje esto. ¿Por qué México es el país número uno en pornografía infantil? Porque aquí no le interesa a ningún político.
La última gran batalla la dio una colega, Lidia Cacho y sus revelaciones en un libro titulado «los demonios del Edén”. Ella desnudó una de las más crueles redes de prostitución infantil en Quintana Roo…un par de detenidos solamente y con los días, la amnesia generalizada.
Explíqueme ¿cómo es posible que el maltrato a un perrito documentado en un vídeo –acto totalmente cobarde y que merece castigo– tenga más impacto que la desaparición diaria de miles de nuestros pequeños? …de esto no se habla.
En este momento, en estos segundos, sabe cuántos seres humanos de corta edad están siendo abusados sexualmente y grabados? ¡¡¡Cientos!!!
En un albergue en Los Ángeles, California, encontraron a una peque de 8 años, indocumentada, de Honduras, no saben cómo llego ahí, pero un estudio reveló la huella genética de 70 hombres, 70 hombres la violaron.
Ella logró escapar, muerta en vida, pero su cuerpo de ocho años da cuenta del horror sufrido.
Usted es padre o madre, sus hijos son pequeños, los ama, los cuida. Usted es abuelo o abuelita, consiente a sus nietos o nietas, ¿se imagina siquiera un final así para los suyos?… Si alguna de las víctimas fuese hijo o hija de algún famoso o político ¿qué cree que sucedería?…¿entonces?, ¿por qué no se habla de esto?
Peor, ¿por qué no estamos haciendo algo?