MIGUEL ÁNGEL LÓPEZ FARÍAS
lo políticamente correcto es decir que el estado mexicano trabaja para garantizar que la paz y el progreso reinen en nuestros hogares, lo incorrecto seria decir cómo se le hace para que México no sea un estercolero, y para ello se llevan a cabo muchas cosas que su solo hedor nos haría volver el estómago.
Dejemos de chiquilladas y miremos las cosas como son, ese cuento de los abogados de los narcos, los de moda son los del mayo, Juan Pablo Penilla y Juan Manuel Delgado, lo que significa una bolsa de basurea en medio de la sala, que apesta, pero que nadie se atreve a reconocer como suya, es el recordatoria de que alguien debe hacer el trabajo sucio para que las cosas funcionen.
Solo una mente hipócrita o de plano infectada por la ignorancia se creería el cuento de que en este solar solo se debe respirar aire puro y pristiño, cuando para el manejo de una sociedad y todos sus actores (esto incluye a los detestables narcos y otras especies de la fauna del mal) se requiere un estomago de acero.
Los narcos son un estado dentro del estado, y no de ahorita, llevan más de medio siglo construyendo su propia nación, a ratos bajo parámetros de respeto a la vida de los demás y concentrados en su negocio del tráfico de estupefacientes, o en tiempos desbocados, impunes y frenéticos ante el palenque sin control tal y como ocurrió el sexenio pasado, narcos que enloquecieron al no encontrar otro castigo que el de sentirse arrepentidos solo porque el expresidente se los pedía.
En México, como en la gran mayoría de las naciones se llevan a cabo tareas que serían inconfesables, pero que son necesarias para hacer que el estado camine. ¿cómo cree usted que se pactaron tantos años de tranquilidad entre mafiosos italianos en Nueva York o Nueva Orleans y el gobierno de los EUA-por cierto, los mismos mafiosos participaron en la segunda guerra mundial como operadores para la caída del dictador italiano Benito Mussolini?, ¿cómo cree que Miguel Ángel Félix Gallardo pudo erigir una fraternidad narca desde Guadalajara y que aplacó a todos los jefes de los carteles al punto de aliarse con la CIA para llevar armas a Nicaragua en la lucha de los contras?…en cualquier tipo de gobierno, los fontaneros son tan útiles como lo son los más preclaros legisladores, entonces ¿debe ser un escándalo el que un grupo de abogados se declare profesionalmente apto para representar a narcos y que estos mismos abogados mantengan cercanía con el gobierno en turno? Si debemos abrir la boca y exclamar un » ¡DIOS MIO, QUÉ BARBARIDAD!», debería ser por el hecho de que apenas estamos conociendo un sub mundo que lleva años operando de esta manera y no precisamente para que los malos se salgan con la suya, sino para evitar que todo un país se vaya al barranco ante la falta de controles, y esto se consigue con acuerdos, con pactos…¿está mal que el gobierno de México tenga que acordar con narcos y asesinos?, por supuesto que sí, pero esto no es una catedra para buenas conciencias , la idealización del estado es uno de los errores de los románticos del derecho, pero no existe , existe la realidad y sobre ella deberíamos debatir.
La única frontera que se debe colocar es en el amasiato entre gobiernos y narcos, algo que el loco de Trump ha mencionado y que, aunque se niegue, es parte de los cuadros mexicanos, tenemos un gobernador de Sinaloa como Rocha Moya rayando en cinismo mientras se credencializa con Andy López Beltrán o Cuauhtémoc Blanco y las varias reuniones con lideres criminales.
Eso no puede continuar. la coexistencia entre los representantes del gobierno y los lideres de los grupos criminales, rompen con el equilibrio que todo estado debe tener. seamos claros, la basura, que siempre existirá no pude salir de los contenedores. ese debe ser el mensaje.
Si este gobierno o los que vengan no apostaran por la ruta de una guerra total en contra de los carteles, con tantísima sangre en las calles y años de más violencia, pues que se opte por mantener a la fauna criminal bajo control. pero ojo, para que el rancho no se incendie, es necesario utilizar a aquellos que, sean abogados del diablo o mensajeros de Dios, que hagan su trabajo de mantener la basura en su lugar.
Usted disculpe, pero esto es política al desnudo.