>> Termina el proselitismo electoral y ahora… ¡a velar armas!
>> Hasta las mañaneras de AMLO de jueves y viernes serán suspendidas
>> La verdadera encuesta de tendencia del voto se reflejará el domingo
MARIO DÍAZ
H. Matamoros, Tamaulipas. Hoy, al filo de la medianoche, el proceso electoral concurrente 2023-2024 entrará en la etapa final de silencio total en lo que respecta a la actividad proselitista de quienes aspiran a un cargo de elección popular.
A partir del primer minuto de mañana, candidatos, dirigentes partidistas y los respectivos comités de campaña habrán de suspender toda actividad que conlleve al convencimiento ciudadano al concluir ese período contemplado en la ley electoral.
Por esa razón, se suspenderán las conferencias mañaneras del presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR correspondientes a los días jueves y viernes, reanudándolas el lunes 3 de junio, una vez concluida la jornada dominical comicial.
De acuerdo con el calendario oficial del Instituto Nacional Electoral (INE) durante 90 días los candidatos presidenciales y quienes pretenden formar parte de la próxima legislatura federal llevaron a cabo sus respectivas campañas proselitistas a lo largo y ancho de república mexicana, los primeros, y en sus respectivos distritos y entidades, los segundos.
Asimismo, de acuerdo con la normatividad electoral, quienes pretenden gobernar las ocho gubernaturas en competencia, el gobierno de la Ciudad de México, Congresos Locales y alcaldías desplegaron la labor de convencimiento ciudadano a lo largo de 45 días.
Por lo tanto, recorridos, reuniones, entrevistas en medios de comunicación, boletines informativos, spots publicitarios, etc., etc., se suspenderán a partir del primer minuto de mañana jueves.
Aunque, a decir verdad, resulta un tanto extraño la decisión del jefe del Ejecutivo federal de suspender las conferencias mañaneras durante el “período del silencio” de 72 horas antes de la votación, cuando a lo largo de tres meses de proselitismo oficial no consideró necesario suspender la plataforma publicitaria desde el salón Tesorería del Palacio Nacional.
En consecuencia, a partir de mañana y hasta la apertura de las casillas electorales, los ciudadanos indecisos tendrán ese tiempo para definir a quien habrán de apoyar con su sufragio en los distintos cargos de elección que estarán en competencia el domingo 2 de junio.
En contraparte, quienes ya tienen decidido el destino de ese derecho cívico solo habrán de esperar el inicio de la jornada electoral para cruzar la boleta en favor de sus respectivos candidatos, bien sea por formar parte de un “voto duro” o bien producto del proselitismo o razonada oferta de campaña.
El “período de silencio total” decretado por el INE-por fortuna-pondrá fin al innecesario y excesivo bombardeo mediático a través de los spots publicitarios en medios de comunicación radiofónicos y televisivos.
Terminarán las intervenciones de los candidatos a cargos de elección popular autocalificándose como la mejor opción y, al mismo tiempo, ofertando promesas de bienestar social, pero sin precisar cómo le harán para aterrizar tales o cuales proyectos.
Del mismo modo, habrán de quedar “para las siguientes pizcas” las muestras de humildad, afecto, solidaridad, “selfies” con las mejores sonrisas y abrazos “cariñosos” con personas de la tercera edad y discapacitados.
Y, como suele suceder en cada proceso electoral, la encuesta real respecto a preferencias o tendencias electorales e intención del voto ciudadano surgirá luego del conteo de votos y con información oficial del Instituto Nacional Electoral.
Hasta el último minuto de hoy, las distintas empresas encuestadoras estarán en condiciones de publicitar sus respectivos sondeos con base en sus propias metodologías, sin pasar por alto que, en muchas ocasiones los resultados son “a la medida” del contratante.
Sin embargo, al margen de encuestas serias o no, lo cierto es que la tendencia general sugiere la continuidad de la Cuarta Transformación, pero sin la mayoría calificada en el parlamento azteca, lo que, por supuesto, sería un proyecto fallido de la 4T.
La “joya de la corona” que significa el gobierno capitalino no está del todo definida, pero, al final de la jornada comicial, se despejará la duda respecto a que si la Ciudad de México continúa con el sello izquierdista o cambia a la derechización.
Por lo pronto y en vísperas del período de “silencio total”, la moneda está en el aire.
DESDE EL BALCÓN:
I.-Al margen de preferencias electorales, lo cierto es que a partir del primer minuto de mañana tirios y troyanos ya no sufrirán las consecuencias del excesivo e innecesario bombardeo mediático electoral.
Y hasta la próxima.