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>> Gobernador de Sinaloa niega el señalamiento de Ismael Zambada
>> A pesar de ser de los más buscados nadie se enteró de reunión de capos
>> ¿Cómo explicar la custodia a Zambada por comandante de la Judicial?
MARIO DÍAZ
H. Matamoros, Tamaulipas. A pesar de que el gobernador del estado de Sinaloa, RUBÉN ROCHA MOYA, asegura que ni estaba enterado ni estuvo presente en la reunión celebrada en Culiacán en donde el capo del narcotráfico ISMAEL ZAMBADA fue secuestrado y llevado a los Estados Unidos, la versión del mandatario no saca del “ojo del huracán” al gobierno de esa entidad federativa.
La presencia de personas armadas con vestimentas tipo militar en el centro de eventos Huertos del Pedregal ubicado en las afueras de la capital sinaloense, podría ser un indicativo de complicidad por parte de la autoridad estatal y federal.
Además, si se toma en cuenta de que ZAMBADA asegura que al lugar de la cita llegó acompañado del comandante de la Policía Judicial del Estado de Sinaloa, JOSÉ ROSARIO HERAS LÓPEZ, y su escolta personal RODOLFO CHAIDEZ, la presencia y custodia del jefe policial sería otra evidencia del maridaje entre el gobierno sinaloense y los líderes del Cártel de Sinaloa.
ISMAEL El Mayo ZAMBADA y los hermanos IVÁN GUZMÁN SALAZAR y JOAQUÍN GUZMÁN LÓPEZ se reunirían en Huertos del Pedregal para, supuestamente, mediar en un conflicto entre el gobernador RUBÉN ROCHA MOYA y el diputado federal electo y ex rector de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), HÉCTOR MELESIO CUÉN OJEDA, derivado del control político y económico de esa institución de estudios superiores.
El cofundador del Cártel de Sinaloa dice a través de una misiva que su abogado FRANK PÉREZ hizo pública, que a su llegada al punto de reunión observó y saludó a CUÉN OJEDA, por lo que asegura que el mismo día que a él lo secuestraron ese mismo día asesinaron al diputado federal electo por la coalición Fuerza por México.
La versión oficial indica que el también ex rector de la UAS murió al ser baleado durante un intento de robo de su vehículo cuando se encontraba en una gasolinera en Culiacán, Sinaloa. La discrepancia de ambas versiones podría ser aclarada con testimonios del personal y cámaras de seguridad de la estación de servicio.
Hasta el momento, el gobierno del estado de Sinaloa no ha aclarado si JOSÉ ROSARIO HERAS LÓPEZ pertenece o no a las filas de la Policía Judicial del Estado, tal y como asevera El Mayo ZAMBADA. Si la indagatoria es positiva se cimbraría la postura del mandatario sinaloense en cuanto a la negativa de información y protección.
Sin embargo, de entrada, resulta inexplicable que los hermanos GUZMÁN e ISMAEL ZAMBADA hayan pactado una reunión en las afueras de Culiacán a pesar de los señalamientos en su contra y oferta de millonaria recompensa por parte del gobierno de los Estados Unidos.
Misma responsabilidad por omisión o comisión de las autoridades regionales de la Fiscalía General de la República (FGR), de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) y del Centro Nacional de Inteligencia (CNI).
Respecto al probable conflicto de intereses entre el gobernador ROCHA MOYA y el diputado federal electo CUÉN OJEDA, no es descubrir el hilo negro o el agua tibia al afirmar que, generalmente, los gobiernos estatales pretenden influir en la política interna y finanzas de las universidades autónomas.
A juzgar por los hechos, la diferencia de criterios fue utilizada a la perfección por parte de JOAQUÍN GUZMÁN LÓPEZ para secuestrar a su padrino y entregarse voluntariamente a la autoridad norteamericana en un aeropuerto del estado de Nuevo México.
Es indudable que el gobierno yanqui negoció el secuestro y entrega a espaldas de la Cuarta Transformación en una acción que dejaría en tela de duda la honorabilidad de la justicia mexicana.
Mientras tanto, la FGR atraerá el homicidio de HÉCTOR MELESIO CUÉN OJEDA y abrió una carpeta de investigación en torno a los hechos, toda vez que todo hace indicar que en delito de secuestro se cometió en México con la extracción forzada del país del capo sinaloense.
¿Cómo la ve?
DESDE EL BALCÓN:
I.-Dadas las condiciones geográficas y el poderío del Cártel de Sinaloa resulta punto menos que imposible que no exista una relación entre el gobierno estatal y el crimen organizado.
Justamente en Culiacán, Sinaloa, en un operativo militar se logró la captura de IVÁN GUZMÁN, pero hubo de ser liberado por instrucciones del presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR “para evitar un baño de sangre”.
Y hasta la próxima.
