>> Congreso Local devuelve atribuciones al Poder Ejecutivo
>> Por vergüenza, diputados panistas y priístas no asistieron a la sesión
>> Aseguran que Cabeza de Vaca está “vendiendo caro su amor”
MARIO DÍAZ (El Diario de Matamoros). H. Matamoros, Tamaulipas. Bien sea por una política de “tejido fino” o bien derivado de una negociación, lo cierto es que las atribuciones de la Fiscalía General del Estado vuelven al punto inicial hasta antes de que la mayoría panista en el Congreso Local la convirtieran en una “superfiscalía” atendiendo instrucciones del entonces gobernador FRANCISCO JAVIER GARCÍA CABEZA DE VACA.
En efecto, con 17 votos de la bancada morenista, el del diputado de Movimiento Ciudadano y una diputada panista, la actual legislatura tamaulipeca derogó la reforma constitucional que otorgó un super poder al fiscal IRVING BARRIOS MOJICA, orientado a “blindar” al ex mandatario tamaulipeco.
En consecuencia, el Secretariado Ejecutivo de Seguridad Pública, la Unidad de Inteligencia Financiera y el Centro General de Coordinación, Control y Comunicaciones e Inteligencia vuelven a ser controlados por el Ejecutivo Estatal.
Para evitar la humillación luego de haber aprobado por la vía “fast track” la iniciativa de GARCÍA CABEZA DE VACA tres meses antes de concluir su mandato constitucional, los 15 legisladores de la bancada panista y los dos diputados del PRI prefirieron no participar en la sesión legislativa.
Durante los trabajos en el parlamento cuerudo se analizaron dictámenes relacionados con la Ley de Adquisiciones para la Administración Pública del Estado de Tamaulipas y la Ley de Hacienda para el estado de Tamaulipas.
Recientemente, con votación mayoritaria, los diputados de Morena y sus aliados lograron dar marcha atrás a otra iniciativa de ley enviada por el ex mandatario para impedir que el gobernador AMÉRICO VILLAREAL ANAYA tuviera facultades para designar a los gerentes de las Comisiones de Agua Potable y Alcantarillado (COMAPAS).
En esa ocasión, las diputadas panistas LINDA MIREYA GONZÁLEZ ZÚÑIGA, NORMA GÓMEZ GONZÁLEZ y SANDRA LUZ GARCÍA GUAJARDO fueron decisivos para que el Congreso Local desactivara la “mina política” que GARCÍA CABEZA DE VACA le heredara a VILLARREAL ANAYA.
Es significativo e indicio de negociación política el hecho de que la legisladora GARCÍA GUAJARDO votara en contra de la iniciativa aprobada por la mayoría panista, tomando en cuenta que su carrera política se la debe al ex gobernador de Tamaulipas.
Sobra decir que la diputada SANDRA LUZ GARCÍA GUAJARDO recibió instrucciones precisas de FRANCISCO JAVIER GARCÍA CABEZA DE VACA para que votara en contra de lo que anteriormente había aprobado.
Vale la pena precisar que en la sesión legislativa del pasado jueves para eliminar la “superfiscalía”, con el voto de la diputada albiazul GONZÁLEZ ZÚÑIGA fue suficiente para lograr el quorum que requiere de la mitad más uno de los 36 representantes populares que integran el Congreso Local.
No resulta aventurado ni temerario presumir una negociación política entre el gobierno de la Cuarta Transformación en Tamaulipas y la administración estatal que se identificó como “los vientos del cambio”.
Es evidente que, poco a poco, el mandatario AMÉRICO VILLARREAL ANAYA está en franco proceso de fortalecer su gobierno y atribuciones que le dejó mermadas mediante artimañas legislativas su antecesor y ahora prófugo de la justicia.
DESDE EL BALCÓN:
I.-Si no se producen cambios de última hora, concluyendo las fiestas decembrinas y de fin de año el doctor FEDERICO HÉCTOR MARÍN MARTÍNEZ estaría relevando a la doctora VELIA PATRICIA SILVA DELFÍN en la delegación estatal del Instituto Mexicano del Seguro Social.
También, apenas iniciando el 2023 se designará al sustituto del doctor CELSO PORFIRIO PÉREZ GONZÁLEZ, quien, por jubilación, dejó acéfala la dirección del Hospital General de Zona 13 en este puerto fronterizo.
Y hasta la próxima.