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>> ¿Inmunidad fiscal y candidatura a la presidencia de Río Bravo?
>> Infantil argumento del ahora ex dirigente estatal del PRI
>> Américo estaría desactivando el “campo minado” que le dejó Cabeza de Vaca
MARIO DÍAZ (El Diario de Matamoros) H. Matamoros, Tamaulipas. Sin que necesariamente se pretenda descubrir el “hilo negro o el agua tibia”, lo cierto es que la renuncia de EDGAR MELHEM SALINAS a la presidencia del Comité Directivo Estatal del PRI obedece, sin duda, a una negociación entre el ahora ex dirigente estatal tricolor y el nuevo poder político en Tamaulipas.
Resulta infantil e irrisorio el argumento del también diputado local priísta en el sentido de que el trabajo legislativo y la elección extraordinaria por la senaduría vacante reclama toda su atención como integrante de la legislatura tamaulipeca.
Tan simple como analizar que el proceso electoral que convoca a las urnas el domingo 19 de febrero del año próximo, en nada se compara con la elección de junio pasado que pintó de guinda a la entidad y sacó al PAN del gobierno a pesar de la alianza con el PRI y el PRD, y, en esa ocasión, no presentó su renuncia a la dirigencia estatal del partido ex invencible.
Asimismo, vale la pena subrayar que apenas un día antes de su decisión partidista, MELHEM y su compañera de bancada en el Congreso local se abstuvieron de votar en el pleno la eliminación del candado legislativo que impedía que el gobernador AMÉRICO VILLARREAL ANAYA designara a los gerentes de las Comisiones de Agua Potable y Alcantarillado (COMAPAS).
La abstención de los dos diputados priístas y el voto a favor de tres diputadas panistas fueron decisivos para desactivar esa “mina” dejada por el ex mandatario FRANCISCO JAVIER GARCÍA CABEZA DE VACA, y que en su momento avalaron.
En consecuencia, no resulta temerario ni aventurado suponer que la Cuarta Transformación en Tamaulipas comienza a tomar el control político en la entidad mediante el método que exige el arte de la política: la negociación.
Con todo y que el Partido Revolucionario Institucional prácticamente fue borrado del escenario tamaulipeco mediante negociación cupular que dio paso a la primera alternancia política en la esquina noreste del país, hipotéticamente, la negociación política con EDGAR MELHEM seguramente se dio entre varias generosas “cláusulas”.
En ese contexto, no sería de extrañarse que el diputado tricolor, además de la renuncia a la dirigencia estatal, anuncie su adhesión a la bancada morenista o, al menos, los dos votos priístas se sumen en favor de Morena tal y como sucede con el voto único de Movimiento Ciudadano en la actual legislatura.
Muy seguramente, el nativo de Río Bravo, Tamaulipas, y sempiterno aspirante a presidir el ayuntamiento de esa ciudad fronteriza, contemple entre sus proyectos políticos aterrizar ese legítimo deseo ciudadano a cambio de pintar de guinda su actual camiseta tricolor.
Del mismo modo, el hecho de que tres mujeres diputadas panistas muy ligadas al ex mandatario estatal se hayan prestado a lograr la mayoría simple para que el actual gobernante designe a los directores de las COMAPAS, indiscutiblemente es un signo de negociación política y no necesariamente por la “defensa de los intereses del pueblo”.
De acuerdo a la votación en el pleno, el pasado lunes, a los votos de los 17 legisladores morenistas se sumaron el de Movimiento Ciudadano y los tres albiazules, para dar un total de 21 aprobaciones de 36 posibles.
Desde esa misma perspectiva, en eventual suma de los dos votos del PRI en el Congreso Local, la bancada de Morena en el Congreso Local estaría a un solo voto para lograr la mayoría calificada que exigen otros candados legislativos que se aprobaron por instrucciones de GARCÍA CABEZA DE VACA.
La renuncia de EDGAR MELHEM SALINAS a la dirigencia estatal del PRI y el voto a favor de las tres diputadas panistas-cabecistas (SANDRA LUZ GARCÍA GUAJARDO, NORMA GÓMEZ GONZÁLEZ y LINDA MIREYA ZÚÑIGA) serían indicios consistentes de que el gobernador AMÉRICO VILLAREAL ANAYA ha comenzado a desactivar el “campo minado” que le dejó su antecesor.
Quiérase o no, lo cierto es que la decisión del riobravense le generará comentarios encontrados de los priístas de hueso colorado que confiaron en su liderazgo y sus promesas de “revivir a un muerto ya enterrado”.
DESDE EL BALCÓN:
I.-Desde cierta óptica, tal parece que la apreciación del ex dirigente estatal del PAN, FRANCISCO “KIKO” ELIZONDO SALAZAR, no es del todo objetiva y está matizada como un gesto de agradecimiento.
Resulta que para “Kiko” ELIZONDO, el ex gobernador FRANCISCO JAVIER GARCÍA CABEZA DE VACA es la mejor opción para ser el candidato a la senaduría en la próxima elección extraordinaria.
El panista que pretende ser el candidato al relevo de MARIO LÓPEZ HERNÁNDEZ en la alcaldía matamorense en 2024, asegura que la seguridad, inversiones y turismo crecieron durante el gobierno de los “vientos del cambio”.
Opinión respetada y respetable, pero…
II.-Con rotundo éxito se llevó a cabo la ceremonia de entrega del Premio Nacional de Locución que otorga cada año la Asociación Nacional de Locutores de México A.C. (ANLM) que preside la licenciada en periodismo y Doctora Honoris Causa ROSALÍA BUAÚN SÁNCHEZ, acto que se llevó a cabo en el Teatro Ferrocarrilero de la ciudad de México.
Entre otras destacadas personalidades, al presídium fue invitado el licenciado en periodismo JOSÉ LUIS URIBE ORTEGA, presidente del Club Primera Plana (CPP).
Brilló por su ausencia el sedicente “líder” de una “federación” y de un “colegio”, como igual sucedió durante la entrega de Reconocimientos al Mérito Periodístico del CPP.
En noviembre de 2019, quien abajo suscribe al calce, recibió la Medalla “Álvaro Gálvez y Fuentes” por parte de la Asociación Nacional de Locutores de México A.C. en Reconocimiento al Valor y Honradez Periodística.
Y hasta la próxima.
