>> Colectivo Nacional de Víctimas responsabiliza a una corporación estatal
>> Maestro y restaurantero fueron liberados tras el pago del rescate
>> La dirigente del Colectivo solicitó ayuda por redes sociales a grupos criminales
MARIO DÍAZ
H. Matamoros, Tamaulipas. Sin pasar por alto que la liberación de dos personas secuestradas en hechos distintos es lo más importante, no deja de extrañar la mediación de una asociación civil con grupos delictivos que operan en ciudad Reynosa, Tamaulipas.
En efecto, en sendos comunicados a través de las redes sociales, la representante del Colectivo Nacional de Víctimas 10 de Marzo y de la Unión de Colectivos de Madres Buscadoras en Tamaulipas, DELIA QUIROA VALDEZ, solicitó el apoyo delincuencial para localizar y liberar a un profesor y a un empresario restaurantero.
Durante la última semana del mes pasado, un grupo armado secuestró al profesor JUAN MANUEL LÓPEZ SALINAS, quien además de la actividad docente se dedica a la compra-venta de autos usados.
De acuerdo a la denuncia interpuesta ante la Fiscalía General de Justicia (FGJ), LÓPEZ SALINAS, quien fuera liberado el 25 de julio, precisó que sus captores lo liberaron luego de que su familia les pagó 800 mil pesos que le exigían a cambio de su libertad. Inicialmente los secuestradores les solicitaron 3 millones de pesos.
Realidad o coincidencia, lo cierto es que luego del comunicado cibernético de la señora QUIROA VALDEZ solicitando la intervención de los grupos delictivos que operan en esa región tamaulipeca “pues sabemos que ustedes no son los responsables”, el mentor fue liberado.
Extrañamente, sin aportar suficientes elementos de prueba, tanto la mujer activista como la víctima del secuestro aseguran que los responsables del secuestro y cobro por el rescate pertenecen a una corporación policial estatal.
Sea como fuere, lo cierto es que el profesor de secundaria y comerciante de autos usados JUAN MANUEL LÓPEZ SALINAS resolvió la privación ilegal de su libertad mediante el pago de 800 mil pesos que le exigieron sus captores.
La historia se repitió apenas iniciado el presente mes, luego de que delincuentes armados secuestraron al empresario restaurantero JOSÉ VENTURA CASTILLO RAMÍREZ, de 78 años de edad, en hechos ocurridos también en la petrolera población tamaulipeca.
El señor CASTILLO RAMÍREZ es el progenitor de VERÓNICA CASTILLO quien es suplente de la senadora electa por Tamaulipas y ex secretaria del Trabajo, OLGA SOSA.
La víctima de los secuestradores fue liberada a las 23:30 horas del primero de agosto en un punto cercano a su domicilio. El empresario reynosense fue privado de su libertad en horas del día del pasado 31 de julio por un grupo de sujetos armados quienes lo interceptaron cuando salió de su negocio.
Horas después del secuestro la dirigente del Colectivo Nacional de Víctimas 10 de Marzo y de la Unión de Colectivos de Madres Buscadoras en Tamaulipas, DELIA QUIROA VALDEZ, a través de sus redes sociales pidió el apoyo a los grupos criminales que operan en esa región del norte de la entidad para localizar y liberar al septuagenario secuestrado.
Nuevamente, coincidencia o no, lo cierto es que en las siguientes horas el empresario restaurantero JOSÉ VENTURA CASTILLO RAMÍREZ fue puesto en libertad. Se desconoce si sus familiares pagaron los 2 millones de pesos que los delincuentes exigían como pago de rescate.
Con relación a los hechos, fueron detenidos y vinculados a proceso tres personas como probables responsables del secuestro, derivado de un adeudo de 3 millones 500 mil pesos por una franquicia restaurantera que, presuntamente, JOSÉ VENTURA debía al padre de uno de los detenidos identificado como JARED ALBERTO “D”.
JARED amaneció muerto en el Centro de Ejecución de Sanciones (CEDES) de ciudad Reynosa presentando múltiples golpes en distintas partes del cuerpo. Sin embargo, ROMANA LÓPEZ VEGA, directora del centro penitenciario, informó a la autoridad judicial que el detenido murió “por causas naturales”.
Al igual que en el secuestro del profesor de secundaria y vendedor de autos usados, la activista social presume que los responsables del secuestro del restaurantero son miembros de una corporación policial estatal y que ya fue amenazada por su labor intervencionista.
Como si se tratara de un nuevo método para hacer frente al secuestro, en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, una mujer solicitó el auxilio de “una persona poderosa” para que liberaran a su hermano y un sobrino que fueron “levantados” por un comando armado afuera de un taller mecánico en la colonia El Paraíso, la tarde el primero de agosto.
A través de sus redes sociales una mujer que se identificó como “M. Isabel y Santiago” envió un mensaje para solicitar la liberación de su hermano CÉSAR CANTÚ ESCOBAR y a su sobrino CÉSAR EMILIANO HERNÁNDEZ CANTÚ.
“Usted que tiene a mi hermano y sobrino, le reconozco su poder, recursos humanos y económicos, sobre todo poder y también un corazón. Por favor apelo a su corazón y a su poder para regresarlos con nosotros, su familia”, escribió en su red social la familiar directa de los secuestrados.
¿Cómo la ve?
DESDE EL BALCÓN:
I.-Como es evidente, tal parece que está surgiendo una nueva “herramienta” para enfrentar los casos de secuestro por parte de grupos criminales.
Por lo pronto, lleva dos “dianas” el Colectivo Nacional de Víctimas 10 de Marzo y la Unión de Colectivos de Madres Buscadoras en Tamaulipas.
Y hasta la próxima.