>> Gobierno federal se compromete a brindar mayor seguridad en carreteras
>> Desactiva por el momento el movimiento convocado por transportistas
>> Imparables los asaltos carreteros a choferes de transportes de carga
MARIO DÍAZ
H. Matamoros, Tamaulipas. Sin el menor ánimo pesimista pero con un enfoque realista, no resulta temerario ni aventurado dudar de la sana intención del gobierno de la Cuarta Transformación para solucionar el grave problema de inseguridad que vienen sufriendo los empresarios del transporte de carga.
Al menos por el momento, mediante la promesa de instalación de mesas de diálogo orientadas a continuar los trabajos de conciliación a fin de garantizar mayor seguridad en las carreteras federales, la Secretaría de Gobernación logró desactivar el movimiento de protesta que habría de realizarse hoy por parte de la Federación Mexicoamericana de Transportistas A.C. (FEMATRAC).
Si bien es cierto que tráfico vehicular en los principales tramos carreteros del país no se verá afectado por el desplazamiento lento de tráileres y camiones, también es cierto que el amague de los transportistas podría concretarse si el gobierno federal no les cumple sus peticiones.
Las distintas organizaciones que agrupan a empresarios y choferes de autotransporte de carga aseguran que los asaltos carreteros es una situación que “los está asfixiando”, colocando en grave predicamento ese importante eslabón de la cadena productiva.
De acuerdo a la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (CANACAR) el año pasado se registraron 13 mil robos de mercancías diversas; el 93 % de los asaltos carreteros se concentraron en diez entidades federativas, pero con mayor actividad en el estado de México, Puebla, Guanajuato, San Luis Potosí, Jalisco y Michoacán.
Según la CANACAR Los grupos delictivos que operan impunemente en las carreteras federales obligan a los conductores de camiones con capacidad para cinco toneladas, tráileres y vehículos conocidos como “rabones”.
La advertencia de los transportistas de carga para efectuar desplazamientos lentos por las carreteras a partir de las 7 de la mañana de hoy surtió efecto y, al menos por el momento, el movimiento se desactivó luego del diálogo y acuerdo entre el gobierno federal y las asociaciones civiles que agrupan a empresarios y choferes del autotransporte de carga.
De acuerdo a la estrategia de presión a gobierno de la Cuarta Transformación la mayor parte de la actividad se llevaría a cabo en distintos tramos carreteros en los estados de Sinaloa, Jalisco, Nayarit, Guanajuato, Veracruz, Querétaro, Morelia y Chihuahua, en el entendido de que no habría bloqueos, pero sí desplazamiento de las pesadas unidades a baja velocidad, lo cual, por supuesto, ocasionaría caos vehicular.
La convocatoria para la movilización de protesta por parte de la Coalición de Organizaciones Unidas de Autotransporte para hoy lunes 5 de febrero, motivó la reunión de trabajo por parte de los titulares de la Secretaría de Gobernación (SEGOB), la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transporte (SICT), La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) y la Guardia Nacional (GN) para diseñar acciones que permitan brindar mayor seguridad en las carreteras del país.
En la esquina contraria de la mesa de diálogo participaron la Federación Mexicoamericana de Transportistas A.C. (FEMATRAC), Organización Integradora de Derechos Convencionales A.C. (INDECO), Alianza Mexicana de Transportistas A.C. (AMTAC) y la Unión de Transportistas de Carga (UTRACASIN).
Entre los acuerdos logrados entre el gobierno federal y los transportistas destaca la integración de tres mesas de trabajo que darán seguimiento a los distintos planteamientos que fueron abordados en la mesa de diálogo y negociación.
La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, así como la Guardia Nacional se comprometieron a reforzar la vigilancia en las carreteras; los asuntos relacionados con la atención administrativa serán abordados por la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes; mientras que la Secretaría de Gobernación será el enlace institucional con las autoridades estatales y municipales.
Lo dicho; sin el menor ánimo pesimista, pero desde un enfoque realista no se vislumbra cómo actuará el gobierno de la 4T para enfrentar y solucionar el grave problema social que representan los asaltos en las carreteras a lo largo y ancho de la república mexicana.
Si se toma en cuenta que los asaltantes pertenecen a grupos delictivos organizados y que sus acciones obedecen a la diversificación de la actividad delictiva del crimen organizado, se antoja punto menos que imposible que se aterricen los acuerdos de la mesa de diálogo y negociación.
Ni hablar.
DESDE EL BALCÓN:
I.-Será por demás interesante conocer la estrategia y resultados del régimen lopezobradorista, respecto al grave problema que representan para la cadena productiva los atracos carreteros y robo de mercancías.
II.-De último momento, algunas organizaciones de transportistas no avalaron el acuerdo con la Secretaría de Gobernación y se manifestaron en favor de llevar a cabo la marcha lenta y pacífica en algunas carreteras federales.
Y hasta la próxima.