>> La 4T espera el rechazo en San Lázaro a la reforma electoral
>> Con el Plan B que se presentará en febrero se reducirán las finanzas al INE
>> “Alito” no le teme al proceso de desafuero en la Cámara de Diputados
MARIO DÍAZ (El Diario de Matamoros) H. Matamoros, Tamaulipas. A pesar de la alta expectativa de que la iniciativa presidencial no pasará en el palacio legislativo de San Lázaro, la bancada morenista presentará al pleno la reforma electoral (Plan A) que pretende el presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR.
La mayoría calificada que requiere la reforma constitucional está fuera del alcance de los diputados de Morena y sus aliados, por lo que la 4T prepara el Plan B que presentará en febrero de 2023.
En efecto, el muy seguro rechazo del bloque opositor en la Cámara Baja del Congreso de la Unión impedirá la eliminación de las diputaciones plurinominales y las senadurías de primera minoría y representación proporcional.
Es decir, la integración legislativa continuará con los 300 diputados de mayoría relativa y los 200 de reparto sin pasar por las urnas electorales y, además, la Cámara Alta seguirá formada por los 128 senadores emanados de los principios de mayoría, primera minoría y de representación proporcional.
Sin embargo, en contraparte, el Plan B de la reforma electoral que requiere solo de mayoría simple en San Lázaro, impactará financieramente al Instituto Nacional Electoral (INE) al reducir 3 mil millones de pesos el gasto operativo de la Dirección de Capacitación y de la Dirección de Organización de ese instituto ciudadano y autónomo.
Ante la imposibilidad de lograr el consenso necesario para reformar la Constitución en materia electoral, el gobierno de la Cuarta Transformación enfocará sus baterías en las leyes secundarias que permitirán, entre otras acciones, acotar los gastos del INE sin poner en riesgo la organización de los procesos electorales.
No obstante, el estira y afloja entre la 4T y el bloque opositor en la Cámara de Diputados es aprovechado por el presidente LÓPEZ OBRADOR para exhibir-desde su punto de vista-a quienes se oponen a reducir el número de legisladores en ambas cámaras del Congreso de la Unión y consejeros del INE, y aprovechar el ahorro económico para los programas sociales.
Subir al pleno el Plan A, mañana martes, y diferir para febrero próximo la presentación del Plan B, podría interpretarse como que el huésped de Palacio Nacional no quiere negociar con las bancadas opositoras en la Cámara de Diputados y, en cambio, se conforma con impactar financieramente al órgano electoral.
La “raja política” que obtendrá con el bombardeo a la oposición desde las conferencias mañaneras, sin duda, influirá positivamente en su porcentaje de popularidad que oscila alrededor del 60%.
La mala imagen y nulo beneficio de los diputados plurinominales que solo atienden y se preocupan de los partidos que los propusieron y no del electorado es una trinchera de la oposición muy difícil de defender.
Las generosas percepciones económicas de los consejeros del Instituto Nacional Electoral quienes, en muchos de los casos, sucumben a los “cantos de sirenas” procedentes de intereses económicos o partidistas, seguramente será “oro molido” en la pretensión de la 4T para dar continuidad al proyecto de nación del presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR.
Tal vez a ello obedezca que el legislador y dirigente nacional el PRI, ALEJANDRO MORENO CÁRDENAS, grite a los cuatro vientos que se opondrá a la iniciativa presidencial que pretende reformar la Constitución en materia electoral.
“No me voy a ningún lado” y “vamos a impedir que sigan destruyendo México” son algunos de los argumentos de MORENO CÁRDENAS, sin importarle el proceso de desafuero que enfrenta en la Cámara de Diputados.
Desde cierta perspectiva tal parece que se trata de una postura negociada con la 4T, contrario a lo que ocurrió con la reforma constitucional para legitimar la presencia de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública.
Muy seguramente el alto mando morenista considera que se impondrá a la oposición en la elección presidencial de 2024, incluyendo la mayoría en el Congreso de la Unión. En consecuencia, la estrategia consistiría en fortalecerse en las elecciones del año próximo en el estado de México y Coahuila, para llegar con todo al proceso electoral de 2024.
DESDE EL BALCÓN:
I.-Entre hoy y mañana, será el período de registro para los aspirantes a la candidatura de Morena al escaño vacante en el Senado por lo que resta de la actual Legislatura.
A Inicios de la próxima semana la cúpula morenista emitirá el dictamen respectivo que, de acuerdo a la convocatoria, será inapelable.
Aunque la decisión ya está tomada, el partido en el poder nacional agotara el protocolo estatutario en materia de elecciones internas.
Sobra decir que, en ese tipo de competencias al interior, el afortunado suele ser quien está más cerca y relacionado con la marca política del momento: en este caso Morena-AMLO o AMLO-Morena.
Así que… ¡hagan sus apuestas señores!
Y hasta la próxima.