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GUADALUPE RAMOS PONCE* (SemMéxico, Guadalajara, Jalisco). La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), aseguró que los feminicidios, desapariciones y ataques a periodistas se deben a que “el modelo neoliberal permitió su crecimiento” y arremetió contra la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derecho Humanos (OACNUDH) luego de que su representante, Guillermo Fernández Maldonado, señaló que la cantidad de víctimas de violencia, desaparición y ataques contra defensoras y defensores de derechos humanos y periodistas en México corresponde a un país que sufre un conflicto armado interno.
Los señalamientos del Alto Comisionado fueron rechazados por la CNDH y en un comunicado el organismo aseguró que “la situación de la vigencia de los derechos humanos en el país no está en duda, como tampoco, que las instituciones que trabajan en su garantía se han fortalecido”. “La CNDH recuerda que los conflictos armados internos tienen, de conformidad con el derecho internacional humanitario, una serie de criterios que obligan a utilizar los términos adecuados, desde un análisis de contexto e interseccionalidad, para no generar alarmas y llamar al pánico o, peor aún, leerlas bajo la lupa electoral”.
En su comunicado, la CNDH sostuvo que, aunque en 2022 se registraron 17 asesinatos de periodistas, y se han registrado 3 durante 2023, eso “no se traduce en conflicto armado”.
“Basta el conocimiento mínimo de los análisis de riesgo, para saber que la situación para el ejercicio del periodismo y la libertad de expresión en México es mucho mejor que la que se vive en países que viven conflictos armados”, señaló la Comisión.
La CNDH aseguró que los casos de feminicidios, violencia, desapariciones y ataques en perjuicio de personas defensoras y periodistas, están históricamente enraizados, en muchos de los casos, debido al modelo neoliberal que permitió su crecimiento y evitó y criminalizó cualquier ejercicio de crítica.
También atribuyó esta situación a que gobiernos anteriores heredaron inseguridad, así como la colusión de autoridades con el crimen organizado. Ante esta situación, aseguró que la actual administración -que encabeza Andrés Manuel López Obrador- ha “logrado visibilizar y poner en la agenda pública estos y otros problemas”.
Finalmente, la Comisión consideró que la OACNUDH-México “se adhiera a un discurso sesgado y marcado por intereses electorales, no abona en nada a la defensa de los derechos humanos en México, y mucho menos a tener un diagnóstico real de las causas de la problemática nacional, indispensable para entablar las acciones más pertinentes”.
Mal se ve la CNDH regañando al Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos en México por evidenciar la realidad que la propia Comisión Nacional trata de ocultar. Si bien es cierto que esta problemática de violencia es heredada de gobiernos anteriores, también es cierto que durante el actual gobierno se ha agudizada esa violencia en torno a los feminicidios, desapariciones y ataques a periodistas.
Hoy más que nunca se requiere de una CNDH fuerte, que sirva de contrapeso a quien violenta derechos humanos, de nada sirve una Comisión débil y puesta a disposición del gobierno en turno. De nada sirve una Comisión que, en lugar de unir esfuerzos con los organismos protectores de derechos humanos internacionales, se convierta en su contraparte y en abogada de un Estado que no ha sabido detener las múltiples violaciones a los derechos humanos en nuestro país.
Dra. María Guadalupe Ramos Ponce
Vicecoordinadora de CLADEM en México
Profesora Investigadora de la UdeG.
@dralupitaramosp
Canal de Youtoube Dra. Lupita Ramos.
