TERESA GIL
No se le hizo a la candidata opositora. que los personajes que pensaba incluir en su periplo, la recibieran y escucharan sus diatribas. Uno de ellos fue Mario Vargas Llosa, que en este momento se esconde, quizá, de los medios, después de la andanada que le echaron encima por sus fallidos amores con la ex de Julio iglesias, Isabel Preysler. Su último estallido de pasión quedó trunco. Eso me recordó a William Holden en aquella memorable escena de Poder que mata (Network 1976. de Sidney Lumet), en la que su esposa, dolida, le reclama sus amores con Faye Dunaway y que vuelque en ella como hombre maduro, “tu último estallido de pasión”. Por ese breve, pero emotivo reproche, ella Beatrice Straight. ganó el Óscar como actriz de reparto. Los escarceos finales del Premio Nobel con Isabel Preysler, muy difundidos por la llamada prensa del corazón, han molestado al peruano-español, porque pusieron en evidencia el tipo de relaciones que se dan entre esas personas adultas y como el dinero es el que da la pauta en ellas.
VARGAS LLOSA CONSIDERÓ MINÚSCULA A LA CANDIDATA OPOSITORA Y NO LA VIO
Chismes y debilidades aparte, lo cierto es que el autor de La Ciudad y los perros ocupa también buena porción de su tiempo en defender a los adalides de la intervención y el caso de la opositora se le hizo minúsculo y la vio muy pequeña para tomarla en cuenta. Él ha estado con personajes como el ex mandatario Felipe González, que bien cebados y enriquecidos con sus negocios y premios, quieren componer el mundo como candiles de la calle. La presencia de González en Venezuela para enfrentar a Nicolás Maduro apoyando a la oposición y a Estados Unidos, le ha sustraído lo poco que quedaba de su imagen. Al recuerdo de su creación de las GAAL para matar vascos y ahora apoyado por un hombre como Vargas llosa, se suman las complicidades con otros libertadores de lo ajeno como Felipe Calderón. Este solo fue a saludar a la candidata según dice ella misma, aunque analistas señalan que el tipo que se robó la presidencia entra al quite en la campaña de la oposición, tras el desbarranque de algunos importantes; y en la alternancia en su lugar con Calderón, el ahora placero Lorenzo Córdova.
VARGAS LLOSA INTERVENCIONISTA DE DERECHA, EN LA LISTA OPOSITORA
Todos esos personajes que no saben qué hacer con su hiperactividad como Vargas Llosa, pueden estar enmarcados en un plan de desestabilización más general, con comunicadores incluidos, como lo han denunciado algunos medios mexicanos. Ese plan estaría prohijado por Estados Unidos, que en el pasado lo hizo con otros personeros. Volviendo a los verdes amores, Mario e Isabel fueron pareja, como en su momento lo fueron Holden y Faye en el filme mencionado. De William en su momento, que no era ningún inocente, también se cuentan situaciones intervencionistas como agente de la CIA y hay quienes relacionan su misteriosa muerte ocurrida en Santa Mónica en 1981, con esa actividad. En Misterios de Hollywood sin resolver (Editorial Diana 1996) su autor John Austin relata como el famoso actor fue encontrado cinco días después de su muerte con un golpe en el cabeza ocasionado por una caída. Se presume que estaba borracho. El evento disparó las antiguas historias sobre un actor trabajando para Estados Unidos, desde la época de Eisenhower; de ahí los muchos y misteriosos viajes y desapariciones que se le conocían, al parecer como intervencionista en países que no coincidían con su país. Pero antes, en el premiado filme, disfrutó su último estallido de pasión, en lo que también se hermana con el Nobel.