TERESA GIL
La Constitución mexicana dice que cualquier esclavo que penetre en nuestro país deja de serlo. Y en el mismo sentido deben equipararse esos que se llaman nobles y tienen otras decantaciones, porque aquí todos somos ciudadanos. Las llamadas marquesas que vienen a meterse en nuestras cuestiones internas deben ser expulsadas vía el artículo 33 de nuestra Carta magna. La última parte de ese artículo es tajante:” Los extranjeros no podrán de ninguna manera inmiscuirse en los asuntos políticos del país”. De risa loca sería hablar de nobles, aristócratas, reyes, emperadores et al, si no fuera por el hecho de que existen en algunos países y determinan en muchos sentidos para mal, la vida de los pueblos. Esas estructuras decadentes que tienen mucho de medieval en su aplicación funcionan en 28 sitios del mundo, y aunque no en toda la presencia del llamado noble interviene directamente, suele ser esa presencia, detractora económicamente para las grandes poblaciones. Por ejemplo, en España, el presupuesto tiene un fuerte arranque con los gastos de la llamada Corona. Y el conocido sector noble que mucho tiene que ver con el franquismo se sigue moviendo y lanzando mordidas a un dinero que podría servir a la gran población. Todos los llamados nobles que incluye esa corona, cuya diferencia con el resto de la gente no percibimos pese a considerarse electos por dios, reciben un ingreso mensual.
LA MENCIONADA MARQUESA ES UNA MUJER COMÚN, DERECHOSA Y TORPE
La presencia de la política de ultraderecha española Cayetana Álvarez de Toledo que fue invitada a venir por un deudor fiscal el que está amenazando con volverla a traer para recorrer el país en este tiempo de elecciones, se metió en nuestra vida interna. El gobierno se queda corto en ese caso, porque quien viene a intervenir en la vida interna y es un extranjero indeseable, debe ser expulsado vía el artículo 33 de la Constitución. Otros gobiernos han aplicado ese artículo, pero siempre en función de sus posturas. Fecal, por ejemplo, dejó libre, apoyado por la Corte, a una presunta secuestradora como Florence Cassez, pero expulsó al cantante Manu Chao que lanzaba a la fama la canción sobre la explotación de los migrantes en la grande Babilonia, que considera que es Europa. Para eso le sirvió a Fecal el 33. Pero los arribos como el ultraderechista Vox y otros similares incluyendo a la mujer mencionada, que se metió en nuestros asuntos, deben de tener cuanto antes su 33. Basta de tolerancias.
LA LLAMADA ARISTOCRACIA YA TROPIEZA CON LOS PUEBLOS
Por lo general y volvemos a España, las monarquías tienden a la derecha de tal manera que la presencia de Álvarez de Toledo como miembro del Partido Popular no sorprendió. En México cuando uno de esos llamados aristócratas viene en representación oficial, es recibido con el respeto que se merece y un caso así ha sido Inglaterra. La fallecida reina Isabel se expresó muy bien de nuestro país. Sin embargo, se nota en este momento que hay un descenso en la presencia de esa monarquía en la visión del pueblo. Si se observa bien, en lo que va del tiempo de reinado de Carlos 111, las expresiones públicas de ese sector manifiestan la superficialidad de su presencia. Toda la historia de la monarquía inglesa se refleja en este momento en la persona de Kate Middleton, que ha sufrido una enfermedad grave y cuya situación es motivo mundial de comentarios diarios. Como en otros países, impactan por su presencia, pero pese a sus riquezas, parte del erario de esos pueblos sigue entrando a sus bolsillos. Y lo peor es que quieren intervenir en otros países, como el caso de la marquesa española, tan mencionada.