TERESA GIL. El círculo que se va cerrando en torno a Genaro García Luna que pone en entredicho al Partido Acción Nacional (PAN) y a sus personajes, exacerba más las actitudes de ese partido sin importar a quien lastima. A gente de su propio grupo incluso, ancianos panistas que reciben la pensión de adultos mayores, a través de la tarjeta Bienestar. Criminal lo que está haciendo el PAN, en sus reductos, al atacar ese aporte fundamental como es el apoyo que se da a los ancianos en esa tarjeta de Bienestar. No solo se niega el uso de los espacios que ya es una violación, está otra que se agrega a la anterior, el mencionado partido olvida que esos bienes no le pertenecen porque son del dominio público es decir, son de todos. Más cuando son de uso común. El caso puede estar expuesto en todo el país, pero en la capital algunas alcaldías, especialmente la Benito Juárez, ha orillado a la Secretaría de Bienestar a ocupar recintos federales, porque en la propia ciudad que tiene asiento se le niegan ciertos espacios. Un ejemplo es la negativa del parque Rosendo Arnaíz de la alcaldía Benito Juárez, que se documenta expresamente por link a los beneficiarios para que vayan a recoger sus tarjetas. En sustitución, Bienestar ha fijado las instalaciones de la SCOP para los miles de ancianos que faltan.
LA LEY ORGÁNICA DE ALCALDÍAS DE LA CDMX, PERMITE USO SOCIAL DE ESPACIOS
Buena parte de las alcaldías y municipios del país, confunden el uso común de los espacios públicos y lo vemos en algunas de la CDMX, en la que las banquetas en buena parte están ocupadas para venta de comida al grado de que el bien público de uso común lo convierten algunos sectores en algo de uso comercial que las mismas autoridades promueven. Es en el control de grupos que tienen negocios en muchos lados de la ciudad, en baquetas por lo general, pequeñas empresas que se coluden con los alcaldes para usar esos bienes. La ley Orgánica de Alcaldías de la CDMX. muy semejante a otras de municipios del país, es muy clara al señalar los espacio comunes, con el carácter estético, político, social , educativo, cultural, incluso lúdico como los juegos en los parques, pero nunca mercantil. No pueden sustituir parques, jardines y banquetas en espacios para economía informal, porque tienen otra función. Hay unos parques que en lugar de ser espacio de liberación de aire puro exhalan olor a comida por las tantas fondas que los rodean. Es lo que pasa actualmente con el parque Rosendo Arnaíz que le negaron a Bienestar para la entrega de tarjetas, pero si dan permisos permanentes de fondas y vertedero de malos olores.
ANTE LA INMENSIDAD DEL CRIMEN, LA POBREZA DE ANCIANOS Y SU TARJETA
La dicotomía que se vive en nuestro país, con la herencia terrible que se exhibe por todos lados en el mundo, va al extremo de ancianos que necesitan un apoyo económico para sobrevivir. Lo que vemos en este momento con el caso espectacular de García Luna y lo que hay atrás, ex presidentes como Fox, Calderón, Peña Nieto y otras personas de altos vuelos involucradas, se enfrenta a la contradicción de negar a ancianos un lugar de recepción para recoger las tarjetas que les darán de comer. Es lo que crea la disparidad que se da en este caso con el PAN metido en ambos asuntos. Estos meses serán cruciales para el país en un juicio del que México puede salir fortalecido si realmente hay una solución auténtica.