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YANETH TAMAYO ÁVALOS ( SemMéxico, Querétaro, Querétaro). El día internacional de la mujer es una conmemoración que le permite a todos los países, sensibilizar a su ciudadanía e informarlos sobre asuntos relevantes que hacen visible lo padecido por las mujeres en sus naciones, pero, además, es una forma de llamar la atención de los medios de comunicación y los Gobiernos para dar a conocer problemas sin resolver que precisan la puesta en marcha de medidas políticas concretas.
Algunos momentos clave en la historia
El Día Internacional de la Mujer, lleva no menos de noventa años de lucha en pro de la igualdad, la justicia, la paz y el desarrollo.
En 1910, Copenhague (Dinamarca), en la Segunda Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas, deciden organizar anualmente una jornada de la mujer teniendo por mira reforzar su lucha por obtener el sufragio femenino universal.
A partir de 1911 se empezó a conmemorar el Día Internacional de la Mujer en numerosos países europeos y en Estados Unidos. La fecha fue el 19 de marzo, en evocación de las mujeres en la Revolución alemana de 1848 y de la Comuna de París. Donde se pronunciaron por el derecho de voto y de ocupar cargos públicos, exigieron el derecho al trabajo, a la formación profesional y a la no discriminación laboral.
En 1913, las mujeres rusas conmemoraron su primer Día Internacional de la Mujer el último domingo de febrero, organizando mítines clandestinos. En el resto de Europa, las mujeres organizaron reuniones en torno al 8 de marzo del año siguiente para protestar por la primera guerra mundial y para solidarizarse con el resto de mujeres.
Es hasta 1917, cuando el gobierno provisional ruso les concedió a las mujeres el derecho de voto. Ese histórico domingo fue el 23 de febrero, según el calendario juliano utilizado entonces en Rusia, o el 8 de marzo, según el calendario gregoriano utilizado en otros países.
Tras la Segunda Guerra Mundial, el 8 de marzo comenzó a tomar protagonismo en muchos países, incluso antes de ser reconocido por la ONU. Organismo que en 1975 y dos años más tarde lo proclamó a través de su Asamblea como el Día Internacional de la Mujer.
¿Por qué se congregan?
En algunos países donde las mujeres llevan más de un cuarto de siglo luchando por el reconocimiento de sus derechos, apenas se ha enfatizado la presencia y contribución de la mujer al mundo real a través de su trabajo en lo privado y no en lo público.
La validación de la opinión femenina sobre su rol doméstico, como su participación fuera de este, han sido conquistas logradas en un proceso gradual al interior de una sociedad en la cual la dominación masculina sigue imponiendo resistencias a la participación femenina.
Lo cual ha propiciado que en la actualidad las condiciones de igualdad, equidad y justicia se encuentren distantes de ser una realidad, debido a que las creencias de la sociedad siguen jugando un papel determinante que entorpece y obstaculiza el libre desarrollo de todas las mujeres.
Y justamente son estas circunstancias las que congregan a las mujeres cada 8 de marzo; hartas de la violencia extrema con las que son desaparecidas, violadas, golpeadas, calladas, obligadas a parir y encarceladas por sobrevivir y exigir.
Pero también, del oportunismo masculino que busca silenciarlas al socavar y eliminar las protecciones dirigidas a mujeres y niñas contra la discriminación basada en el sexo y las obligaciones estatales que les ayuda a lograr la igualdad.
El contexto actual.
Hoy en día existe un debate social que se contrapone con la lucha de las mujeres, debido a los intereses de un grupo que pretende absorber los espacios ganados por ellas, para beneficiarse bajo una supuesta inclusión. Hecho que ha ocasionado que las mujeres hoy tengan que enfrentar un embate en el que tienen que expresarse sin incomodar a las nuevas tendencias inclusivas y reaccionarias.
Situación que pone en riesgo a aquellas que disienten en puntos de vista, pues son tildadas de transfóbicas y excluyentes, el no adaptar su agenda y visión las hace propensas a la censura, una nueva mordaza les ha sido colocada.
A esto se le suma, los altos índices en el delito de feminicidio y abusos sexuales en mujeres e infantes, así como, la carente respuesta en materia de justiciabilidad.
Esto, sin olvidarnos de la incongruencia y falsedad, con la que el sistema enmascara la realidad para obtener el beneplácito social y acumular valor político, al fingir que no pasa nada y que son permisivos al dejarlas manifestarse, siempre y cuando lo hagan de forma pacífica, sin discursos de odio y por supuesto sin destrozos.
Finalizando
Si bien, en el transcurso de la historia hemos tenido avances, la situación sigue siendo desequilibrada y más cuando se incorporan nuevas resistencias que surgen de procesos derivados del orden social y de las relaciones de poder instaladas y respetadas en el modo social de organización.
Por ello, la relevancia de las aportaciones feministas no corresponde a menudo con el reconocimiento institucional que reciben.
Desde esta perspectiva, es muy importante que el Estado identifique los mecanismos que invisibilizan los aportes y estudios de las mujeres; así logrará evitar usurpar saberes y dotarlos de reformulaciones que no permiten identificar la idea original de emancipación femenina.
Además, de evitar el silenciamiento, en el sentido de no otorgar entidad debida a los saberes y dejarlos excluidos por no ser cómodos ante el compromiso de ser correctamente políticos.
Se debe evitar a toda costa los discursos falaces, que cometen aquellas personas que, ignorando todo aquello que se ha realizado, comienzan a hablar de la mujer, de las mujeres y del género, sin situarlo críticamente en la posición en que se enmarca.
Quizás las ideas y las resistencias sean diversas para cada mujer, pero lo que sí es seguro es que, todas queremos una vida digna y libre de violencia que nos otorguen la garantía de desarrollar y disfrutar nuestros derechos como personas, para ello necesitamos espacios donde podamos comunicar nuestras ideas y necesidades sin ser etiquetadas, atacadas ni silenciadas.
https://www.un.org/es/observances/womens-day
Feminismo, debates teóricos contemporáneos
