JUAN CHÁVEZ
A pesar de la sequía que asola a los estados del norte, México pagará a Estados Unidos el agua que le debe, con volúmenes de presas internacionales y seis afluentes del río Bravo.
El gobierno de Claudia Sheinbaum anunció que en el acuerdo con Estados Unidos se priorizó la atención a la sequía.
En las últimas semanas políticos de EU se habían quejado de que el «incumplimiento», por parte de México, estaba perjudicando a los agricultores de Texas.
El gobierno de México anunció que llegó a un acuerdo con el de Estados Unidos, sobre las asignaciones de agua del río Bravo conforme al Tratado de 1944.
Según se detalló, México acordó con Estados Unidos la realización de una serie de medidas con el objetivo de mitigar el potencial faltante en las entregas de agua de México hacia al final del ciclo, previendo transferencias de agua inmediatas, así como durante la próxima temporada de lluvias.
Al respecto, la secretaria de Agricultura de Estados Unidos, Brooke Rollins, confirmó que desde este lunes México aumentaría sus envíos de agua a Texas para ayudar a compensar un déficit, según el tratado, que define la repartición del agua entre los países.
El gobierno mexicano dijo que la decisión fue tomada “con el firme deseo de continuar con el cumplimiento de sus compromisos conferidos en el Tratado de 1944, que ha sido de gran beneficio para el desarrollo de la frontera norte del país”.
Además, se confirmó que la Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA) dará seguimiento tanto a la ejecución de estas acciones y a la evolución de las condiciones de la cuenca en conjunto con la Comisión Nacional del Agua (Conagua), con la meta de generar un plan para el siguiente ciclo del Tratado de 1944 que asegure el cumplimiento de los compromisos de México derivados de este y el siguiente ciclo, incluyendo un mecanismo de consultas anuales de alto nivel.
“Todas estas acciones tienen como premisa fundamental el asegurar el abastecimiento para consumo humano de las poblaciones mexicanas que dependen de las aguas del río Bravo “, añadió.
¿Y de dónde saldrá el agua que se enviará a EU?
El departamento de Estado de EU dijo en un comunicado que “México se ha comprometido a transferir agua de inmediato desde embalses internacionales y a aumentar la cuota estadounidense del caudal en seis afluentes del río Bravo hasta el final del ciclo hidrológico quinquenal actual».
El gobierno mexicano se comprometió a cumplir el tratado de agua con EU bajo las consideraciones de sequía.
Después del reclamo de Donald Trump a México por incumplir con el tratado de 1944, el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Julio Berdegué, sostuvo una llamada con su semejante estadounidense Brooke Rollins y Chris Landau, subsecretario de Estado, para comprometerse a cumplir con la entrega de agua.
El Tratado de Aguas establece que México debe entregar cada quinquenio cerca de 2 mil 160 millones de metros cúbicos a Estados Unidos por los ríos (Bravo y Colorado) que comparten en la frontera, aunque los mexicanos reciben casi cuatro veces más: 9 mil 250 millones de metros cúbicos.