JUAN CHÁVEZ
Eso va a entrañar la reforma del Poder Judicial propuesta por López Obrador y Sheinbaum, obvio, va a cargar con el “muerto”.
Pelear con Estados Unidos vulnera nuestra economía.
El diario estadounidense The Washington Post en un editorial, señala que Estados Unidos tiene razón al intervenir, porque “lo que está en juego son la independencia judicial y el Estado de Derecho en un país que ha conocido demasiado poco de ambas cosas a lo largo de su historia”.
Los mexicanos, sin el Poder Judicial que tenemos hasta ahora, vamos a perder no solo la democracia, también nuestras libertades. Viviremos aplastados por un régimen autoritario cercano a la dictadura, dueño de los tres poderes de la Unión: Ejecutivo, Legislativo y Judicial.
El capítulo que más preocupa a Estados Unidos y Canadá es el que tiene que ver con que todos los miembros del sistema judicial federal, incluyendo jueces de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, sean elegidos por el pueblo en 2025 y 2027.
“Sería una vergüenza si muere la independencia judicial en México por la falta de independencia política de la señora Sheinbaum respecto del señor López Obrador”, dice en su editorial de ayer el influyente periódico.
Por su parte, el Observatorio Ciudadanía Católica y Análisis Social del Consejo Nacional de Laicos advirtió que, por la voluntad de un solo hombre, el país se dirige velozmente a un cambio de régimen jurídico, político e institucional en el que se destruyen las bases de la democracia y el equilibrio de poderes.
Ayer, 1,100 jueces y magistrados solicitaron a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, evitar la reforma judicial, que fue aprobada por el bloque oficialista en una comisión de la Cámara de Diputados.
Margaret Satterthwaite, relatora especial de la ONU sobre la independencia de jueces y abogados, señaló que “politizar el poder judicial mexicano aumenta el riesgo de corrupción”.
Claudia Sheinbaum, concluyó el “Post”, “debería encontrar la forma de expresar su desacuerdo con el plan de López”.
Sería una pena que la independencia judicial en México muriera porque la señora Sheinbaum carece de independencia política del señor López Obrador.
“En juego está la independencia y aplicación de la ley en un país que conoce poco de ambos”, señala el editorial titulado “Se tiene que ir la reforma judicial de AMLO”.
Por su parte, el Observatorio Ciudadanía Católica y Análisis Social del Consejo Nacional de Laicos advirtió que, por la voluntad de un solo hombre, el país se dirige velozmente a un cambio de régimen jurídico, político e institucional en el que se destruyen las bases de la democracia y el equilibrio de poderes.
El domingo, The Wall Street Journal publicó en línea la columna de Mary Anastasia O’Grady donde señala que López Obrador está proponiendo enmiendas constitucionales que violarán el acuerdo
comercial con Estados Unidos y Canadá, y ha prometido que en su último mes en el poder impulsará sus reformas antimercado, que “llama democracia pero que parece más una mafiocracia”.
“La política está sangrando la economía”, apuntó.
“Probablemente no se materialicen los nuevos compromisos financieros de México porque el gobierno discrimina al capital privado, como está haciendo en energía. En tanto las inversiones en electricidad y petróleo se van a otro lugar, un déficit de electricidad barata para la industria podría ser inevitable, donde el último en irse podría no tener que apagar la luz”.
Un primer aviso es el disparo del dólar al alza tan solo porque en comisiones los diputados aprobaron la reforma judicial: se cotizó a 20.14. El peso va pa’bajo.