JUAN CHÁVEZ
Hay ocasiones en que los acontecimientos nacionales, deben ser metidos al clóset. La reforma al Poder Judicial está pasando la aduana del Senado, pero anoche, el “cara-cara” Kamala Harris y Donald Trump, atrajo la atención de muchos mexicanos.
No podía ser de otra manera. A 55 días de la elección presidencial en Estados Unidos, México, con una frontera de más de 3 mil 500 kilómetros con la Unión Americana, está más cerca del país más poderoso del planeta, que de Dios.
El debate fue ríspido. Se atacaron mutuamente y las propuestas, abstractas (faltó el cómo llevarlas a cabo) se diluyó en el golpe a golpe.
Como se dice en el box: se dieron hasta con la cubeta.
Y en medio de ese tira tira, pareció que el debate fue entre Trump y el coordinador David Muir, que lo interpeló hasta en 7 ocasiones y una la coordinadora.
«¿Cómo piensa deportar a 11 millones de indocumentados?», planteó David Muir, quien adquirió un papel activo a lo largo del debate, corrigiendo a Trump y aclarando afirmaciones de este en varias ocasiones.
Tales aclaraciones correspondían a la definición que Kamala planteó al principio: Van a escuchar las mentiras del candidato republicano…
Kamala, no hay duda, sacó su enfrentamiento con Trump como un triunfo más de su campaña por la Casa Blanca.
Harris y Trump protagonizaron un debate caliente sobre economía, aborto e inmigración, tres temas claves que preocupan al votante indeciso
Durante noventa minutos intensos, la vicepresidenta demócrata y el expresidente republicano chocaron con vehemencia para fijar la agenda de campaña cuando quedan 55 días para los comicios del 5 de noviembre
El debate de este martes es el primer enfrentamiento entre Donald Trump y Kamala Harris, luego de semanas de descalificaciones entre ambos bandos y el planteamiento de proyectos en temas de interés para los estadounidenses como la economía, narcotráfico, inmigración y las tensiones geopolíticas por los enfrentamientos en Medio Oriente y la guerra entre Rusia y Ucrania.
México juega un papel importante en el debate. Donald Trump dijo que cerrará la frontera para impedir el paso de más migrantes y luchar contra la crisis de fentanilo, además de que buscará imponer aranceles de 200 por ciento a los autos producidos en México y en China, bajo el argumento de que ambos se adueñaron de una fracción de la industria estadounidenses.
Harris y Trump protagonizaron un debate caliente sobre economía, aborto e inmigración, tres temas claves que preocupan al votante indeciso.
Trump calificó a Kamala de marxista y ella, en su mensaje final dejó claro que “Mi intención es ser presidenta para todos los estadounidenses, enfocándonos e invirtiendo en ustedes”.
Kamala Harris dijo que necesitan un programa de salud a bajo precio. Además, dijo que no quitarán las armas a la gente, y que incluso ella tiene armas. Dijo que 60 veces el gobierno de Trump se intentó deshacer de los cuidados de bajo precio.
“Ella es Biden, la peor economía que hemos tenido”, dijo Trump. Harris reviró y aseguró que ella no es el actual presidente, y que ofrece un proyecto optimista, en vez de buscar dividir a los estadounidenses. “Creo en lo que podemos hacer para fortalecernos. Comparemos los planes, yo tengo un plan.”
Kamala Harris dice que es una tragedia tener de presidente a alguien que quiere usar la raza para dividir a los estadounidenses. “Donald Trump era alguien que tenía edificios y tierras y se le investigó por negarse a rentarle a familias negras. Tomó el New York Times y pidió la ejecución de jóvenes latinos y negros”.
Trump dijo que la OTAN ha estafado a EU en el momento del desarrollo y salida de las tropas norteamericanas de Afganistán.
Criticó que Kamala Harris fue a Medio Oriente a negociar y tres días después estalló la guerra Israel-Hamas. Dijo que la vicepresidenta es una horrible negociadora y que se aproxima a ser la peor funcionaria de la historia.
El expresidente dijo que tiene buena relación con Putin y que lo respetan. En ese sentido Trump señaló que arreglará los conflictos internacionales “rápido”, en dos días.
Kamala Harris defiende el derecho a la defensa de Israel; sin embargo, aseguró que son demasiados los palestinos asesinados. Por ello, dijo que buscan un cese al fuego para rescatar a los rehenes. “Necesitamos un plan para que existan dos estados, y la misma seguridad. Les puedo decir que le voy a dar a Israel la capacidad de defenderse de Irán y cualquier amenaza que pueda representar. Pero necesitamos dignidad y reconstruir Gaza”.
Trump responsabiliza de que “el mundo está explotando” porque todos los países antes le tenían miedo a Trump, y que la crisis de violencia que se vive en el mundo es por las acciones de China. Dijo que mandatarios del mundo se sentían seguros con Trump, y no con Biden, a quien llamó “débil”.
El día después del debate, Kamala Harris y Donald Trump se saludaron en la conmemoración de los atentados del 11-S que encabezó el presidente Biden
“Conmigo no hubo inflación, y ellos (por Biden y Harris) pusieron la inflación más elevada de la historia”, dijo Trump al comienzo del debate.
En este tramo de la discusión pública, Trump y Harris apuntaron a idéntico objetivo electoral: dar una respuesta directa a la principal preocupación en los estadounidenses: la economía hacia adelante, en un contexto de inflación constante y una señal de enfriamiento en la creación de puestos de trabajo.
Los dos candidatos expusieron sus posiciones sobre las guerras en Israel y Ucrania.
“Seré la Presidente de todos los estadounidenses”, cerró Harris.
Trump ya sabía que se quedaba con la última frase de un debate que tuvo audiencia histórica. Y debatió con su staff que debería decir como cierre. Una frase conciliadora, o una línea que sintetizará su naturaleza política.
Al final, Trump fue fiel a sí mismo: “Kamala Harris es la peor vicepresidenta de EU”, dijo.