RODULFO REYES AGUILAR (Tabasco). Tras la candidatura de Morena al gobierno de Tabasco, 2022 feneció con el escenario de que solo había dos aspirantes con posibilidades reales de lograr la nominación, debido a que esa decisión la tomará exclusivamente el mandatario Andrés Manuel López Obrador. Por eso en la cenas de Navidad y Año Nuevo se brindó con la atmósfera de que solo caminaban el titular de Fonatur, Javier May Rodríguez, y el presidente del consejo político estatal de ese partido, Raúl Ojeda Zubieta.
Pero en este 2024, que arrancó con pasos agigantados como producto de la sucesión presidencial a destiempo, ha surgido por fin el que faltaba para completar la terna: el presidente de la Gran Comisión del Congreso local, Jaime Lastra Bastar, inició giras de trabajo con plazas llenas en su distrito electoral, con lo que de manera implícita ha levantado la mano señalando a Plaza de Armas.
Si 2023 se extinguió con la certeza de que solo May y Ojeda estaban en el ánimo de quien despacha en Palacio Nacional, al comenzar el penúltimo ejercicio del sexenio se puso de manifiesto que la lista «ya está completa» y que, al igual que sucede en el ámbito nacional, se ha reducido a tres el número de interesados en lograr la nominación.
De todos los que ambicionan la Quinta Grijalva, que suman la docena aunque solo un par tiene verdadera cercanía con el de Macuspana, Lastra es el que cuenta con una mayor experiencia en la administración, habida cuenta de que en tres ocasiones ha sido titular de la Procuraduría General de Justicia (hoy Fiscalía) y de la Secretaría de Gobierno, y también ha ocupado cargos de la misma relevancia en el vecino estado de Chiapas.
Pese a que ha colaborado en tres administraciones distintas, fue hasta 2021 que participó en su primera elección directa, convirtiéndose en el candidato a diputado local que más votos acopió, pese a que en esa jornada, a diferencia de 2018, ya no se resintió el llamado efecto AMLO.
Hace dos años que los tabasqueños fueron a las urnas por segunda vez durante la era López Obrador, el líder parlamentario sorprendió al convertirse en el primer candidato en arriesgarse por trasmitir sus actos de campaña en vivo.
Lastra Bastar forma parte de la camada de políticos surgida en el gobierno de Manuel Gurría Ordóñez (1992-1994) y que hoy acuerpan al secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, en cuya corriente, dentro de Morena, participa en primerísimo sitio.
Ojeda, que también ha manifestado simpatizar con la precandidatura presidencial de Adán Augusto, no es un cuadro identificado con los conocidos como neomorenistas, que son los ex priístas que colaboran con el responsable de la política interna, por lo que no es considerado la propuesta de este grupo, como sí se distingue al titular del poder Legislativo.
Si bien a Rosalinda López Hernández, hermana de la corcholata tabasqueña, también se le ubica como aspirante a la candidatura morenista, de pronto se le ha excluido porque de un tiempo a la fecha se ha alejado de los reflectores, lo que se ha interpretado como una señal de que no ha sido tomada en cuenta en Palacio Nacional.
Así que la denominación de ficha adancista dentro de la sucesión criolla se la lleva Jaime Lastra, quien viene a completar el cuadro junto a May y a Ojeda.
El responsable del Tren Maya, como es sabido, simpatiza con la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, lo cual lo pone en la esquina contraria del titular de Gobernación.
Así que si se tratara de contar las piezas del ajedrez político de Claudia y Adán, los favoritos del Presidente para el 2024, se diría que mientras la primera solo cuenta con Javier, el segundo tiene a Jaime y a Raúl.
Por supuesto que para nadie es un secreto que será el Presidente el que tenga la última palabra, si bien tampoco debe perderse de vista que el segundo hombre fuerte del gabinete es el otro tabasqueño al que se le da la denominación de Plan B de AMLO.
ESTRICTAMENTE PERSONAL…
A partir de este 2023, De Primera Mano solo se está publicando martes y jueves… hasta que la temperatura electoral constriña a más días.