Fracaso de campañas de comunicación contra la obesidad
VERÓNICA VALDÉS GONZÁLEZ. Reducir la obesidad es uno de los retos de la salud publica más grandes que tenemos en México, entre las múltiples acciones que el gobierno lleva a cabo para atender esta situación están las campañas de comunicación.
Las frases: “Haz ejercicio”, “Come frutas y verduras” y “Aliméntate sanamente” están presente en medios masivos, digitales y tradicionales, como radio, televisión, Facebook, Twitter, YouTube, paradas de autobús, metro, camiones, vallas, prensa, espectaculares, entre otros canales.
Con estas frases, acompañadas de imágenes de personas realizando actividad física o consumiendo alimentos sanos, el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador pretende es crear conciencia entre la población de las implicaciones negativas de la obesidad en la calidad de vida de quienes la padecen, así como el alto riesgo de desarrollar enfermedades crónicas como la diabetes, hipertensión y la muerte prematura.
De acuerdo con el último reporte de la Federación Mundial de Obesidad, México ocupa el quinto lugar de obesidad en el mundo y se estima que la cifra aumente en 35 millones de adultos para la siguiente década.
Asimismo, es el sexto país con la mayor cantidad de adultos mayores de 20 años que viven con obesidad y que tiene el porcentaje más alto de pérdida del producto interno bruto (5.3 por ciento) debido a ella.
En 2019 la obesidad le costo a México 26 millones de dólares y se prevé que de continuar la situación igual para 2060 el gasto aumentará a más de 159 mil millones de dólares.
Hasta ahora se desconocen los resultados de la campaña anti-obesidad implementada por la presente administración, sin embargo, las comorbilidades (dos o más trastornos o enfermedades que ocurren en la misma persona) siguen al alza en el país.
Si bien, esto último no recae únicamente en las campañas publicitarias, éstas juegan un papel importante.
Hoy por hoy se requieren campañas que hagan contrapeso a las agresivas campañas publicitarias que a través de la televisión y de internet realiza la industria alimentaria.
Un artículo publicado por el País indica que los niños reciben 7 mil 500 impactos al año de mensajes publicitarios diciéndoles que coman alimentos no saludables, asociados además a las emociones positivas y a los regalos.
Otro aspecto son mensajes que toda la población pueda entender y comprender. Actualmente uno de los carteles del metro se están las piernas de un hombre (al parecer adulto) jugando avión, al lado una frase que invita a ejercitarse y una figura animada de una fruta.
Luego de observar el cartel surge la siguiente pregunta, a quién va dirigido el mensaje a un adulto o a un niño.
La obesidad es un problema de salud pública a nivel mundial, el cual debe ser abordado en todos los ámbitos que lo originan, para de esta manera lograr su erradicación, lo comunicación juega un papel importante en este sentido.