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HÉCTOR MOCTEZUMA DE LEÓN. Ante los ataques infundados del presidente Andrés Manuel López Obrador, los verdaderos universitarios reprueban la actitud complaciente del actual rector de la UNAM, el oftalmólogo Enrique Graue, quien no quiso dar la cara ante la última embestida del inquilino de Palacio nacional en contra de nuestra Máxima Casa de Estudios.
Necesitamos al frente de la UNAM a un universitario como don Javier Barros Sierra para que contrareste los ataques, injustificados, que desde las mañaneras le lanza el presidente López Obrador a la principal Universidad del país.
Cómo no recordar a don Javier, el rector que desde el campus de Ciudad Universitaria respondió al presidente Gustavo Díaz Ordaz, en los momentos más álgidos del Movimiento Estudiantil del 68, no con boletines de prensa como lo hizo esta vez el doctor Graue, sino con acciones como la de poner a media asta la bandera nacional en honor a los estudiantes víctimas de la represión diazordacista.
Barros Sierra defendió la autonomía universitaria con gallardía y marchó al lado de los estudiantes, en momentos que el régimen priista no repartía abrazos, sino balazos como los que mataron a decenas de estudiantes en la Plaza de las Tres Culturas de Tlatelolco el 2 de octubre de 1968.
Hoy el señor Graue y muchos funcionarios y legisladores egresados de la UNAM se cruzan de brazos ante los insultos del presidente, excepción del líder del Morena en el Senado, Ricardo Monreal quien alzó la voz para ponerse de lado de nuestra querida Universidad, “Soy Puma y me pongo del lado de la UNAM”.
Tal vez López Obrador no tiene ningún respeto por la máxima institución de educación superior del país porque nunca cruzó por sus aulas como me comentan algunos compañeros que cursaron la carrera en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales al inicio de los años 70, cuando se supone que el tabasqueño fue alumno.
Otros dicen que López Obrador obtuvo un título universitario gracias al apoyo de Eduardo “El Chelalo” Beltrán, su ex cuñado, quien fue maestro y Secretario Administrativo en la dirección de la FCPyS. Tarde o temprano saldrá la verdad.
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El que no cabía en júbilo ayer fue Ricardo Monreal luego de la mención que hizo por la mañana el presidente Andrés Manuel López Obrador en la que le dio su visto bueno para que participe en la elección del candidato presidencial de Morena para el 2024. Tuvieron que pasar once meses para que López Obrador se decidiera a incluirlo entre los aspirantes a la Presidencia de la República. Monreal espera que el partido diseñe el mecanismo de selección del candidato y que haya piso parejo en la contienda interna…Otra arbitrariedad del gobernador veracruzano Cuitláhuac García, por decretó despojó del Acuario de Veracruz al patronato que lo administraba, con argucias legaloides como esa de acusar a la administración de tráfico de especies que dio pie a la clausura de uno de los más bellos y visitados Acuarios de Latinoamérica…Miente el lamebotas Hugo López Gatell cuando dice que se registra menos de un muerto diario por la pandemia. En el informe semanal que dio a conocer el lunes la Secretaría de Salud se consigna que en los últimos siete días hubo 148 defunciones y sí pitágoras no miente estas fueron 21.14 por día. Es tal el cinismo del subsecretario de Desprotección a la Salud que no tuvo más que legitimar la contratación de médicos cubanos para darle la razón al presidente, como lo ha hecho siempre.
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