Una delegación de políticos y funcionarios de Chicago fue a la frontera con México para ver lo que todo mundo sabe de la crisis migratoria: un desastre
ROGELIO FAZ
Chicago, Illinois, EEUU. Entrar ilegalmente a Estados Unidos paso de ser una violación administrativa a un problema social y presupuestal. Dio un giro de 180°; se transformó en recibimiento con ayuda.
Mientras que los “ilegales” pagan impuestos siguen viviendo en las ‘sombras’, los asilados reciben ayuda pública, aunque no sean contribuyentes. Además, necesitan permisos de trabajo sino va a ser peor.
Entonces ¿es mejor ser asilado que “mojado”?
Se agravo cuando el criterio de asilo alcanzo hasta para quienes huyen de su cónyuge. Ahora son una carga creando inestabilidad en los servicios para los residentes locales por los mismos motivos.
Santuario a consulta
Su ubicación y costo son los asuntos que están preocupando y molestando. Pues se están acondicionado baldíos para albergues lo que provocó una manifestación en contra la cual se volvió agresiva por lo que tuvo que intervenir la policía.
Hay inconformidad en los sectores más afectados, principalmente en afroamericanos e “hispanos”. Ya que, se tiene planeado instalar carpas gigantes en estos vecindarios ya que el invierno está por llegar. También hay asilados pernoctando en calles, pasillos de estaciones de policía y en los aeropuertos.
Se sugiere que para las elecciones del 2024 se pregunte al elector si Illinois mantiene el estatus de santuario.
La caravana mitigante
Los defensores del estatus santuario humanamente tienen razón, pero en el mundo real, no se ajusta a la realidad. Y menos cuando no se consulta a la comunidad, además de ocultar los gastos estratosféricos para proveerles asistencia.
Supuestamente para encontrar soluciones -que no son muchas-, la delegación fue a ver lo que todo mundo ve. Los migrantes siguen llegando debido al efecto mitigante.
El problema que se tiene en Chicago es mucho menor al que hay en la frontera. Ya no hay forma de recibirlos y atenderlos. Es un desastre.
La ayuda económica
Sin embargo, algunos asilados están reciben ayuda económica por alrededor de $1,500dls. cada mes para pagar renta, cupones para alimentos, más atención médica. Esto está motivando a que arriben ancianos y niños con necesidades especiales que no van a obtener permisos de trabajo. Ya a no evaden a la migra, sino que se entregan para ser atendidos.
Las restricciones en los albergues son similares en la frontera para ingresar a Estados Unidos; no se permite salir o entrar a cualquiera y, hay horarios restringidos.
De santuario a desastre
Políticos pro migrantes reprochan que les envían refugiados o asilados, pero los señalamientos que hacen en contra del gobierno de Texas de violar los derechos humanos se les revirtió.
Es tanto el caos, que la delegación sugirió al gobierno federal se declaren estas áreas oficialmente zonas de desastre y se destinen fondos con ese propósito. Propuesta que agravara el problema.
La crisis migratoria está convirtiendo a Chicago de ciudad santuario en zona de desastre.