“La clave de un buen gobierno se basa en la honestidad.” – Thomas Jefferson.
LUIS RAMÍREZ BAQUEIRO (Veracruz). De verdad que Veracruz va de mal en peor, cuando las cifras lo colocan como una de las entidades en donde la política de seguridad es pura falsedad y simulación –al menos así lo reporta el Secretariado Ejecutivo de Seguridad Pública-, en donde la procuración e impartición de justicia es un asunto empleado para cobrar venganzas de orden político, debemos agregarle una raya más a las andanzas del actual régimen.
Ahora resulta que hasta creadores de historias fantásticas resultaron estos émulos de tiranos, que, con la complacencia de la Fiscal General del Estado (FGE), Verónica Hernández Giandans, realizan, crean y presentan denuncias contra quien sea con tal de seguirle el juego perverso al aún secretario de Gobierno, Eric Patrocinio Cisneros Burgos, quien se ensaña con su antecesor para demostrar que él tiene todo el poder.
La más reciente nos la cuenta el abogado de Rogelio Franco Castán.
Resulta que un juez civil prohibió la convivencia de Guillermina Alvarado con la hija menor de Rogelio Franco, la FGE le abrió otro proceso por el “noveno delito” acusándolo en esta ocasión de sustracción o retención de menor.
De risa resulta el caso, porque es sabido y está documentado que si no es por la intervención de Franco Castán sus hijas especialmente la menor de ellas hubiera quedado a la merced de una inestable madre, con severos problemas mentales y emocionales.
En la ridiculez y desfachatez que ya caracteriza a este Gobierno, este martes lo trasladaron al Penal de Pacho Viejo para sostener la supuesta audiencia.
Lo increíble del caso es que la hija menor está bajo depósito judicial con la mamá de Rogelio Franco luego de que su ex esposa, Guillermina Alvarado, se la enviara para que viviera con él –ella completamente consiente la mandó a vivir con su padre, para estar en posibilidad de vivir ella su vida, tras contraer matrimonio con otro señor.
Todo lo anterior está incorporado en la carpeta de investigación que la FGE se niega a ver –pero ya sabemos porque no lo ven, pues queda claro que la Fiscal hace lo que su patrón mandata-.
Como estará la cosa que a pesar de tener un dictamen psicológico realizado por la FGE donde determina daño psicológico en la menor, causado por Guillermina Alvarado, y, además, también le fue dictada pensión alimenticia, que por varios meses ella no ha cubierto, la dependencia que dice ser garante de la procuración de justicia no cumple, y le da voz a quien resulta ser la imputada.
En este chiste mal contado, resulta que ahora, después de 14 meses, lo haya denunciado por este hecho, los mismos abogados señalan que solo en el bizarro estado de derecho veracruzano es como se pueden dar estas acciones, mismas que confirman la rabia y la saña con la que se conduce el actual régimen.
De acuerdo a su abogado, a Rogelio Franco le fue notificado dicho citatorio a audiencia inicial para llevarse a cabo el día jueves 11 de mayo, a las 3:00 de la tarde, en los juzgados de Pacho Viejo.
¿Porque hasta ahora se le denuncia por esto a Rogelio Franco? Se preguntan amigos y conocidos, la realidad es simple, el propósito es impedir la inminente libertad de Franco Castán al tener solo un delito como medida cautelar de prisión y que está a la espera que la justicia federal anule.
Así se las gastan los émulos del gran tlatoani, evidenciando que el rencor, el odio, la trasgresión, son la causa de sus acciones, porque eso de impartir justicia apegado a derecho, es evidente que no.
La pregunta es ¿hasta cuándo toleraremos a estas autoridades, hasta cuándo? Porque vendernos el caso de que Rogelio Franco es el súper maloso de los malosos, resulta un chiste mal contado.
Al tiempo.
Twitter: @LuisBaqueiro_mx